Esta semana se realizó el evento de clausura de Atlántico Acelera, proyecto del Gobierno del Atlántico junto con la Cámara de Comercio de Barranquilla, que logró resultados extraordinarios. En dos años se generaron más de 400 empleos de alto valor en las 21 empresas ganadoras, sus ventas combinadas aumentaron en casi $50.000 millones, se registraron 10 nuevas marcas y 6 productos estaban listos para exportar. ¿Cómo lo lograron?
La respuesta corta es: aprovechar el círculo virtuoso de confianza entre el sector público y privado que ha sido un gran elemento transformador para Barranquilla y el Atlántico. Yo explico. El objetivo de la iniciativa es “incrementar el acceso a recursos de inversión para desarrollar procesos de aceleración en Empresas con Alto Potencial Innovador (EAPI)”. Esto se traduce en brindar financiamiento, a través de un mecanismo de coinversión uno a uno, donde por cada peso de inversión privada, el sector público aportó otro peso de recursos no reembolsables, en emprendimientos rigurosamente evaluados.
Parece sencillo pero la verdadera magia está en la ejecución. Los desafíos que debieron superar fueron exigentes e incluyeron la preparación del gobierno corporativo de los emprendimientos seleccionados para recibir la inversión, la falta de redes de inversionistas ángeles en la ciudad, la disponibilidad de expertos en valoración de negocios y el tiempo requerido, due diligence y negociación. de participaciones en las empresas, y finalmente la emisión de pólizas de garantía para la legalización del contrato de cofinanciamiento.
De esta manera, se podrían aportar casi $10.000 millones de pesos provenientes del Sistema General de Regalías asociadas a la Ciencia, Tecnología e Innovación y otros casi $10.000 millones de pesos de inversionistas privados donde las empresas beneficiadas recibieron hasta $500 millones no reembolsables. Los recursos estuvieron acompañados de asesoramiento personalizado a cada EAPI en materia de elaboración de presupuestos, planificación estratégica, riesgos, gestión de empresas familiares y gestión de consejos de administración.
Las empresas seleccionadas pertenecen a los sectores de Agronegocios, Salud y Farmacéutica, Logística y TIC, lo que demuestra el amplio impacto que tiene el proyecto en la innovación del departamento. Ahora el próximo desafío es continuar con una próxima versión, ojalá duplicar el número de EAPI y, por qué no, exportar este proyecto al resto de la región a través del RAP Caribe, que hoy lidera el gobernador Verano, para que más inversionistas sigan apostando por nuestro territorio. ¡Vamos por más!
