Tunja
Este jueves 18 de abril los vendedores informales de Tunja han convocado a una marcha de protesta ante la incertidumbre sobre su futura reubicación. La movilización, que comenzará a las 8:00 de la mañana en el parque recreativo, surge como respuesta a un reciente anuncio de la administración municipal lo que ha generado descontento entre los comerciantes.
El jueves 18 de abril marcharán vendedores informales rechazando su reubicación
Durante un evento al que asistió el gerente de lotería y alcalde Mikhail Krasnov, se anunció un plan para trasladar a los comerciantes al “agujero de las patatas”, un espacio que actualmente es literalmente un vacío. Según el alcalde, se realizará un estudio técnico para evaluar cómo se llevará a cabo este traslado, pero los detalles aún son vagos y la idea ha sido recibida con escepticismo por los afectados.
Julio Borda, portavoz de los vendedores informales de la capital boyacense, expresó la preocupación de la comunidad: “Estamos luchando por nuestro derecho al trabajo y por una reubicación digna. “No queremos que nos trasladen a un lugar inadecuado donde nuestras ventas y nuestros medios de vida se vean comprometidos”.
Los manifestantes han pedido a la administración que cualquier plan de reubicación incluya un diálogo abierto con ellos, para garantizar que se tengan en cuenta sus necesidades y deseos. A pesar de varias solicitudes y derechos de petición, dicen que no han tenido reuniones significativas con el alcalde ni su equipo.
Además de la preocupación por su reubicación, los vendedores han señalado el deterioro del espacio público en Tunja, particularmente en zonas como la calle 20, cuyo muro está seriamente agrietado. Denuncian la falta de mantenimiento y gestión adecuada del espacio público por parte del municipio, así como la necesidad de una regulación que permita el comercio informal en condiciones controladas y seguras.
La marcha culminará en la Plaza Bolívar, donde los vendedores planean expresar sus demandas y preocupaciones sobre el proceso de reubicación, que comparan desfavorablemente con el “mover ganado”., según palabras de Borda. Más de 1.000 vendedores informales esperan que sus voces sean escuchadas y tratadas con la dignidad que merecen como contribuyentes activos a la economía local.
#Colombia
