“En Argentina la industria vitivinícola tiene que ser más grande” – .

“En Argentina la industria vitivinícola tiene que ser más grande” – .
“En Argentina la industria vitivinícola tiene que ser más grande” – .

Marcelo Belmonte es una de esas mentes imprescindibles que tiene la industria en el país. Es un conocedor como pocos de todos los terroirs actuales dentro de esta enorme extensión geográfica, con diferentes climas y altitudes. Y con una serie de imponderables difíciles de comparar con cualquier otro productor a nivel global.

Marcelo es director de Viticultura y Enología del Grupo Peñaflor, fabricante de muchas marcas líderes en el mundo. vino argentino y el mayor exportador de la bebida nacional al mundo.

Es una empresa con un alto flujo en cuanto a números y uno de los principales grupos a nivel mundial. Marcelo coordina el trabajo con más de 700 productores independientes de uva, con más de 3.200 hectáreas productivas propias, 12 centros de producción y presencia en seis provincias vitivinícolas argentinas.

Aquí puedes revivir la nota con Marcelo Belmonte:

Y en las siguientes líneas, un pequeño extracto de todo lo comentado:

Uno de los grandes conocedores del terroir argentino. Foto: Rodrigo D’Angelo / MDZ.

-Estamos muy cerca de celebrar una nueva edición del Malbec Day, ¿corremos el riesgo de volvernos monotemáticos?

-El Malbec ha llegado a la madurez. Cuando llegas a ese punto en una determinada variedad, tienes que empezar a ofrecer al mundo otras alternativas. Lo estamos notando en los mercados. Empieza a haber una mayor demanda de Cabernet Sauvignon, y también de vinos ropa blanca. El mundo avanza hacia las variedades blancas y tenemos que empezar a centrarnos en ello, escuchando al consumidor.

Para empezar a perforar el 2,5% de participación que tiene la Argentina en el mercado mundial, tenemos que empezar a ofrecer esas variedades que el mundo consume. Tenemos que empezar a diversificar un poco más nuestras propuestas comerciales, porque nuevamente Argentina es una fracción muy pequeña del mercado mundial y por eso tenemos que abrir un poco el juego.

El Malbec ha alcanzado un nivel de evolución muy importante. Evidentemente todo se puede mejorar y seguir evolucionando, pero hay que empezar a cambiar el enfoque detrás de las variedades que otros requieren.

-El tema de los vinos sin alcohol: ¿qué visión tiene al respecto?

-Hay un debate en torno a este tema y creo que el mercado manda. Existe una tendencia hacia la moderación del consumo de alcohol en las nuevas generaciones. Esta es una alternativa y los números lo demuestran. Hoy es una fracción menor, pero crece a ritmos mayores que en el caso de las cervezas desalcoholizadas o sin alcohol. Aunque a nivel mundial el mayor consumo de alcohol es la cerveza, es la vino y los espumosos fundamentalmente desalcoholizados son los que están creciendo a un ritmo aún mayor. Es algo donde manda el consumidor y hay que estar atentos.

Hacer crecer la industria, principal objetivo de Marcelo Belmonte. Foto: Rodrigo D’Angelo / MDZ

-Y con la elaboración del vino, ¿cómo os lleváis? Hoy en día existe una tendencia a hablar sólo de la viña…

-La buena enología y la buena viticultura van de la mano, y esa unión es inmejorable. Uno puede moverse dentro de ciertos límites, pero siempre dentro de lo que sabemos que producirá vinos de calidad y consistentemente año tras año. Obviamente, nosotros como grupo también nos dedicamos a la investigación y el desarrollo. Para conocer realmente el impacto de las prácticas en el viñedo o en la enología hay que llegar a los extremos. Esto lo hacemos a nivel experimental y para generar conocimiento. Dentro de esto, hay vinos con más o menos madera, más frescos o algo más maduros. Creo que todos tienen razón. Cada uno tiene su filosofía y hay que respetarla.

-Y según su vasta experiencia, ¿hacia dónde va la enología en Argentina?

-Hay una evolución. Desde que regresé de California, he visto que hemos pasado de vinos más maduro, con más impacto desde la crianza en madera hasta muy buena enología, pero más mirando el lugar y adaptándose a él. En Argentina hay una evolución enorme, porque en una primera etapa nos guiamos por estos “Fly Winemakers”… y ahora hemos desarrollado nuestro propio know-how: creo que estamos en esa etapa.

El desafío que tenemos es el siguiente: ¿cómo hacemos más grande esta industria en Argentina? Es decir, ¿cómo podemos perforar ese 2,5% de la cuota mundial? Cómo aumentamos nuestras ventas vino argentino al mundo. Lo cierto es que en los últimos años se ha producido un techo e incluso una caída en algunos mercados. Ahí radica el desafío: cómo invertir más en intangibles, en valores de marca, en imagen país, en acuerdos de libre comercio. Realmente necesitamos ampliar esta masa de facturación a nivel de la industria argentina para permitir que la cadena vuelva a entrar en un círculo virtuoso.

 
For Latest Updates Follow us on Google News
 

PREV La condena no puede anularse simplemente porque un testigo de cargo se volvió hostil: Corte Suprema -.
NEXT Se lanza la 7ma edición del Festival Audiovisual Latinoamericano SER VOZ – mendoza.edu.ar – .