No corren buenos tiempos para los autónomos. La Rioja, según datos del Sindicato de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA-UGT-Rioja), ha perdido un negocio cada tres días en los últimos tres años o lo que es lo mismo, 339 establecimientos han cerrado sus puertas entre 2020 y 2023 En palabras de Eduardo Abad, secretario general del sindicato, las cifras revelan una “auténtica catástrofe” sobre todo porque las mayores víctimas son las zonas rurales.
En ese mismo período de tiempo, la región ha experimentado un crecimiento negativo, perdiendo 851 trabajadores por cuenta propia. “Si en La Rioja una empresa de 300 trabajadores anuncia un expediente de regulación de empleo, estaríamos hablando de manifestaciones, de una pérdida económica tremenda, pero el lento ahogamiento de nuestro colectivo es también una auténtica catástrofe”, ha afirmado este jueves Eduardo Abad en Logroño. , la víspera se reunió con la ministra de Economía, Innovación, Empresas y Trabajo Por Cuenta Propia, Belinda León, y con funcionarios de la ADER para abordar tres temas que preocupan al gremio: accidentes laborales, relevo generacional y falsos cuentapropistas.
Acompañado del secretario general de UGT, Jesús Izquierdo, y del secretario general de UPTA Rioja, Javier Marzo, insistió en la necesidad de una nueva estrategia de seguridad y salud en el trabajo para reforzar temas como la importancia de la formación en riesgos laborales. y en señalar y sancionar a quienes incumplan las normas de prevención. Todo con una actualización de la ley de prevención de riesgos laborales, vigente desde hace 28 años.
Más allá de los accidentes laborales de los autónomos -en 2023 se contabilizaron 330 accidentes, 6 graves y 3 terminaron con la muerte del trabajador-, Abad ha puesto el foco en aquellas dolencias psicosociales que “se encubren y anulan a la persona”. Una pregunta que también se pondrá sobre la mesa mañana en la reunión con Belinda León.
Otro tema de preocupación es el relevo generacional. En palabras de Abad, un dato basta para darse cuenta de la realidad de los autónomos. El 15% de los autónomos de La Rioja -más de 3.700 en términos absolutos- han cumplido 63 años y “o ponemos en marcha un plan sustitutivo o tendremos datos de cierre de actividad económica por encima de los actuales”.
Finalmente, se refirió a los falsos autónomos. Según su cálculo de los 24.000 existentes, 1.000 tienen esta consideración y así lo confirmaría el incremento experimentado en los últimos tres años en algunos sectores como el sanitario, que no ha tenido su correspondiente reflejo en la apertura de nuevos consultorios médicos. A su juicio, “las nuevas altas se enmarcan en contratos de prestación de servicios de compañías aseguradoras o de clínicas privadas”, anotó.
Lo mismo ocurriría en la educación y en las profesiones técnicas, como ingenieros y arquitectos. Por un lado, ha asegurado, “es competencia desleal para el trabajador que realiza una actividad económica pagando sus cotizaciones, pero también lo es de aquellas empresas que sólo pretenden reducir gastos para tener un mayor resultado económico”. “Cuanto más ahorran en cotizaciones sociales, más dinero gana la empresa”.
El fenómeno del falso cuentapropismo “es una verdadera pandemia del trabajo tradicional” contra la que UPTA luchará para que las inspecciones se incrementen exponencialmente.
Preguntado por el plan de ayudas del Gobierno regional a los autónomos, Abad fue concreto: “El café para todos no sirve”. En su opinión, las ayudas han estado mal diseñadas porque premian lo mismo a un emprendedor que tiene unos ingresos laborales de 200.000 euros que a otros que tienen 8.000 euros, y en La Rioja, según sus datos, el 40% declara ingresos iguales o inferiores que el salario mínimo interprofesional y “es a ellos a quienes se deben dirigir los esfuerzos de ayuda porque son los que están en peor situación”.
