Dos personas fueron detenidas este miércoles, acusadas de ser las autoras de las amenazas contra Ángel Di María, frente a una quinta en Funes donde reside la familia del futbolista. Se trata de un hombre de 35 años y su pareja, una mujer de 23, quienes fueron interceptados por la Policía Federal cuando salían de un céntrico departamento que habían alquilado temporalmente, en medio de lo que se presume un intento de robo. drenar. Las personas fueron identificadas como quienes viajaban en el Renault Megane gris que fue captado por distintas cámaras de seguridad en Funes y que fue encontrado este miércoles en la zona oeste de Rosario. Debido a la difusión de las imágenes, fueron citados a declarar el jefe del Comando Radioeléctrico de Funes y el encargado del Centro de Monitoreo de esa ciudad. “Entendemos que las personas que hoy arrestamos son mano de obra de alguien que puede estar por encima de ellos y que puede ser el ideólogo”, dijo el fiscal Pablo Socca en conferencia de prensa.
La detención se produjo durante la madrugada del miércoles luego de un operativo conjunto con la participación de la Policía Federal y la División de Inteligencia de la Policía de Investigaciones (PDI) de Santa Fe, en un trabajo coordinado entre el Ministerio Público. (MPA) y el Ministerio Público Federal a cargo del Dr. Arzubi Calvo. Los presuntos autores materiales de las amenazas fueron encontrados en un departamento de alquiler temporario en la calle Moreno al 900, en la zona de Maternidad Martín. Según explicó Socca, los sospechosos se ocultaban en ese lugar desde el lunes, por la repercusión que tuvo el caso, y fueron detenidos en el momento en que intentaban salir del lugar a bordo de una camioneta, para escapar de la ciudad.
Durante el allanamiento del departamento, elementos de seguridad encontraron un arma de fuego y municiones del mismo calibre, dos celulares, un pendrive y una bolsa donde encontraron cocaína. La sustancia fue incautada y estaba siendo investigada por Arzubi Calvo, quien venía investigando a los detenidos por presunto tráfico de drogas. En ese contexto, los investigadores encontraron conversaciones telefónicas donde el hombre de 35 años admitió ser el autor de las amenazas contra Di María y su familia.
“Se pudo determinar quién era el dueño de ese vehículo. El auto ya fue mencionado en investigaciones que venía realizando la Justicia federal, por lo que pudimos determinar, al menos inicialmente, cuál era el grupo de personas o la pandilla a la que pertenecía. Luego de cotejar información con la Justicia federal, se determinó que las personas que se encontraban en ese vehículo fueron quienes cometieron el hecho. El conductor y la pasajera, que es la que se ve en las cámaras de seguridad de la estación Puma, se bajan e ingresan al minimarket. Luego ella sube al vehículo y de ahí se dirigen al campo a cometer el crimen”, explicó el fiscal.
En la conferencia, Socca indicó que el móvil del incidente es algo “a investigar” y evitó comentar una posible vinculación con las amenazas registradas esta semana contra taxistas y conductores de autobuses, que derivaron en la suspensión del servicio de transporte público el día 13. Lunes y martes. “No hemos podido determinarlo. Es algo que tenemos que desentrañar. Entendemos que las personas que hoy detuvimos son mano de obra de alguien que puede estar por encima de ellos y que es el ideólogo”, evaluó. Una de las hipótesis que manejan los investigadores es que la amenaza fue ordenada por un preso de alto perfil que se encuentra detenido en Piñero.
La huella del coche y la polémica
Durante la madrugada del lunes, un grupo de personas a bordo de un auto Megane gris arrojó un paquete con una nota amenazante contra Ángel Di María, frente a una quinta en Funes donde reside parte de la familia del futbolista. Según un comunicado emitido por los responsables de seguridad del lugar, antes de huir los sospechosos realizaron cuatro disparos al aire. El mismo vehículo fue captado por las cámaras de seguridad de una estación de servicio Puma, sobre la Ruta 9, en la ciudad vecina. Finalmente, la mañana de este miércoles el auto fue encontrado en la zona oeste de Rosario.
Lo curioso es que, en paralelo, Socca ordenó iniciar una investigación contra policías y funcionarios por la presunta filtración de las imágenes de las cámaras de seguridad de la ciudad de Funes, que captaron el recorrido del auto. Por este hecho, el fiscal citó a declarar al jefe del Comando Radioeléctrico de Funes y al encargado del Observatorio de esa ciudad. El Ministerio Fiscal entiende que la filtración de las imágenes podría haber entorpecido las investigaciones que se estaban llevando a cabo.
Las investigaciones no fueron bien recibidas por las autoridades de Funes. El propio alcalde, Roly Santacroce, salió a defender el accionar del Observatorio y aseguró que las imágenes ayudaron a dar con los presuntos responsables. “Nunca un fiscal me ha dicho que no puedo estar mostrando imágenes de los hechos que ocurren en nuestra ciudad. Ese es un gran primer error. El fiscal podría haberme llamado. “Ponemos en marcha un sistema de protección y seguridad para que la gente pueda vivir más tranquilamente”, explicó en declaraciones a Radio 2. Y añadió: “Lo mínimo que intento hacer como alcalde es intentar obstaculizar, al contrario, Le estoy dando elementos. “Si no tenemos estas cámaras, no tendrían idea de quiénes son ni qué coche era”.
Tras las detenciones, Socca explicó la situación y aclaró que las investigaciones se llevaron a cabo con el fin de “mantener el secretismo y el secretismo” de los operativos que se estaban desarrollando por la mañana. “Entendemos que quizás hayan sucedido cosas que deberían evitarse. En el afán de ayudar, el efecto puede ser el contrario y la investigación puede verse obstaculizada o los autores del hecho pueden escapar, al revelar determinadas situaciones propias de la investigación de la Fiscalía”, insistió.
“Precisamente esto finalmente sucedió, porque los autores del incidente se mudaron de sus direcciones conocidas. Y a partir de escuchas telefónicas y pruebas que tenemos en el caso, estaban preparando la fuga de Rosario. Precisamente de madrugada fueron interceptados por personal de la Policía Federal que había montado, por orden mía, un operativo de vigilancia. Y fueron detenidos en el momento en que se disponían a subir a una camioneta y salir del lugar que habían alquilado”, concluyó.
