José Darío Morales, alias “Cajetito”, un conocido delincuente de la capital correntina, declaró ante la fiscal Lucrecia Troia y negó su participación en el robo de 110 millones de pesos del establecimiento comercial La Reina.
Morales dijo que en la madrugada en que ocurrió el golpe criminal se encontraba con sus hijos, ya que solo había sido liberado tres días después de haber sido detenido por otro motivo.
Puso su celular a disposición de la justicia para que lo examinaran y conocieran las conversaciones que sostenía.
Cabe recordar que el hombre fue detenido luego del allanamiento a una vivienda en el barrio 100 Hogares de la colonia Ponce.
En el lugar se secuestró una mochila (en su interior contenía un radio handie con base de carga y batería, un pasamontañas, un cubrebocas y un gorro de lana negro). También se llevaron cuatro celulares de diferentes marcas y modelos.
Lo que más llamó la atención de los oficiales fue que en un pantalón encontraron hojas escritas a mano con horarios, nombres y direcciones que, supuestamente, estarían relacionadas con el local comercial de La Reina.
También fue incautado un automóvil Peugeot modelo 208 color gris plateado, el cual tenía pedido de secuestro ya que había sido sustraído. Tenía una patente que no correspondía al teléfono móvil.
Según conoció El Litoral, la Policía pudo encontrar a Morales luego de analizar las cámaras de seguridad del negocio. Lo cierto es que los delincuentes tenían el rostro cubierto, por lo que hasta el momento no existen pruebas contundentes que los vinculen con el caso. La titular de la Unidad Fiscal de Investigaciones Concretas de Corrientes, Lucrecia Troia, afirmó que “hemos comprobado que eran cinco y que actuaron con el rostro tapado, la idea es llegar a todos e identificarlos”, ante FM Radio Dos.
Sobre la detención de Morales, el Fiscal indicó que “es una persona ya conocida en el ámbito penal, además las imágenes de cámaras de seguridad que se obtuvieron nos dieron indicios” de su posible participación y destacó el trabajo de la DIC y Delitos Complejos. .
Por la forma en que cometieron la agresión, con la seguridad con la que se desplazaron, aseguran que contaron con la complicidad de algún trabajador o persona que conocía los movimientos internos del negocio.
En la madrugada del 27 de mayo robaron el dinero de toda la recaudación del fin de semana que no estaba en ninguna caja fuerte, sino que estaba guardado en bolsas en una oficina del primer piso.
El negocio carecía de vigilante y guardias de seguridad, hecho que también consiguieron los atracadores.
Justo cuando estacionaban un auto en la calle Uruguay, alrededor de las 2, cinco personas se bajaron con el rostro cubierto, saltaron un muro e ingresaron a un patio interno, donde giraron en dirección a una cámara de seguridad que los apuntaba.
Luego subieron al techo, donde rompieron un durlok para ir directamente a la oficina donde estaban guardados los millones de pesos.
Una vez que tomaron posesión del dinero, partieron por el mismo lugar. Todo duró apenas unos minutos.
Cuando una vecina llamó a la policía después de escuchar ruidos, solo pudo ver a los cinco agresores alejarse.(NG).
