El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silvapreguntó este viernes en la cumbre del G7 la imposición de un impuesto global a los súper ricos, para ayudar a combatir las desigualdades. El presidente brasileño, que participa en la cumbre como invitado, destacó que la concentración de la riqueza en unas pocas manos representa “un riesgo para la democracia”.
“Es hora de que los superricos paguen su parte justa de impuestos. Esta excesiva concentración de poder y de ingresos representa un riesgo para la democracia“dijo Lula, según un comunicado difundido por la Presidencia brasileña.
Erradicar el hambre y la pobreza
Esta propuesta para imponer un impuesto global a los multimillonarios ha sido presentada por Brasil en el marco del G20, foro presidido este año por el país sudamericano. El objetivo de esta propuesta, explicó Lula, es movilizar recursos “ampliar las políticas efectivas” para erradicar el hambre y la pobreza que se están implementando en los países en desarrollo.
En este sentido, pidió el apoyo de todos los presentes en la cumbre del G7 para la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, que Brasil formulará en la cumbre del G20, que se realizará en Río de Janeiro el próximo mes de noviembre. Esta alianza global “será clave para poner fin a este flagelo que aún azota a la humanidad”, subrayó el presidente brasileño.
Brasil presentó la propuesta de gravar a las grandes fortunas durante las reuniones ministeriales del G20 a principios de año, y de momento Ha recibido el apoyo de algunos países europeos, como Francia.
Concentración de riqueza
Este jueves el presidente brasileño reiteró la propuesta en Ginebra, Suiza, durante una reunión de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). “Unas 3.000 personas concentran casi 15 billones (millones de millones) de dólares, más que el producto bruto (PIB) de Japón, Alemania, India y Reino Unido juntos, y más de lo que muchos países necesitarían para desarrollarse”, afirmó el presidente en ese encuentro.
Agregó que los “súper ricos” o las grandes fortunas tienen “concentraciones de ingresos tan absurdas que tienen sus propios programas espaciales”, en alusión a magnates como Elon Muskpropietario de la agencia espacial SpaceX, o Jeff Bezoscuya empresa Blue Origen también incursiona en el espacio exterior.
Bajo una lluvia de aplausos, el exdirigente sindical del acero bromeó diciendo que “quizás encuentren un planeta mejor que la Tierra, aunque los trabajadores de aquí son quienes les han permitido tener sus riquezas. No necesitamos buscar esas salidas mágicas, porque Es la Tierra la que necesita nuestro cuidado, no Marte”.
En Brasil
En diciembre del año pasado Lula promulgó la ley que por primera vez grava las inversiones de los llamados superricos en fondos personalizados y sociedades offshore. El nuevo impuesto contribuyó a que al mes siguiente, en enero de este año, Brasil lograra una recaudación tributaria de 280.636 millones de reales (56.800 millones de dólares), récord histórico para el país, con un aumento del 7% respecto al mismo mes. del año anterior. Alrededor de 830 millones de dólares del total recaudado provinieron del nuevo impuesto.
