La familia del colombiano Edwin Arrieta pidió este miércoles al Gobierno de su país que interceda para garantizar la independencia de la Justicia en el juicio que se desarrolla en Tailandia contra el español Daniel Sancho por el presunto asesinato premeditado del cirujano.
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“Hemos solicitado apoyo y acompañamiento al Ministerio de Relaciones Exteriores, al Consulado de Colombia en Tailandia y a nuestras autoridades diplomáticas y confiamos (que) puedan tomar una decisión urgente sobre el requerimiento solicitado”, dijo la familia en un comunicado.
Fin del juicio
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El proceso se reanudará el jueves tras una extensa sesión este miércoles, que comenzó sobre las 10.30 horas, hora local, y concluyó sobre las 20.00 horas en el Tribunal Provincial de Samui (sur de Tailandia).
Mateo fue citado para examinar el comportamiento y reacciones del imputado en relación al desmembramiento del cuerpo de Arrieta.
Durante su testimonio, Sancho insistió en que la muerte de Arrieta el 2 de agosto en la isla tailandesa de Phangan (cerca de Samui) se debió a una pelea y que actuó en defensa propia, en línea con sus últimas declaraciones.
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Sancho, de 29 años, que es trasladado diariamente al tribunal en un furgón policial desde la cercana prisión de Samui, donde se encuentra en prisión provisional desde el 7 de agosto, está acusado del asesinato premeditado del cirujano Edwin Arrieta, un delito que Tailandia castiga incluso con la pena de muerte, que apenas se aplica.
La Fiscalía de la turística isla de Samui acusa al joven español de otros dos delitos: ocultación del cadáver, debido al desmembramiento de la víctima, cuyos restos fueron encontrados en varios lugares de Phangan, incluido el mar, y destrucción de bienes ajenos. documentación.
El acusado confesó inicialmente el crimen ante la policía tailandesa, pero posteriormente afirmó que se trató de un accidente, y la defensa ha denunciado supuestas irregularidades durante la confesión.
Sancho y Arrieta se habían conocido un año antes a través de Instagram y se conocieron en la localidad turística de Phangan el 2 de agosto, cuando se produjo el presunto crimen.