Dafne Keen (Madrid, 2005) vio las películas de Guerra de las Galaxias con su padre en inglés, pero, cuando lo hacía con sus amigos, los ponía en español. “Recuerdo perfectamente la voz de Darth Vader”., Nos dice recordando a Constantino Romero. De padre británico y madre gallega, nos conquistó con 12 años, devorando Pringles con Hugh Jackman en logan (2017) y protagonizó materia oscura (2019).
Siete años después, la actriz, que creció admirando a Padmé, Han Solo y Luke, tiene la Fuerza de su lado en El acólito, la nueva serie del universo galáctico creada y dirigida por Leslye Headland (Muñeca rusa), que se libera 5 de junio en Disney+. Este thriller nos lleva a la Alta República para seguir a una ex padawan (Amandla Stenberg) que investiga una serie de crímenes.
Naciste en 2005, cuando se estrenó. Venganza de los Sith. ¿Cómo llegaste a la saga?
Entré gracias a mi padre, quien me hizo ver la trilogía original cuando tenía unos siete años. Lo tenían en un videoclub debajo de mi casa, en Cava Baja, y lo alquilamos. Me convertí en un superfan absoluto. Luego pasé a las precuelas y me encontré Venganza de los Sith En secreto en casa de mi amiga, porque mi madre decía que era demasiado violenta.
Siempre me han fascinado las películas que crean universos enteros y los Jedi son lo más genial del mundo. Me disfrazé de Jedi inventado cuando tenía nueve años para el carnaval, no me escondo.
Me imagino tu emoción cuando te llamaron para El acólito.
Fue un casting muy críptico y mi agente me dijo: “Me han dicho que no te lo diga, pero creo que es “Guerra de las Galaxias.” Me dieron una escena indescifrable en la que gritaba un montón de números y coordenadas porque se suponía que debía conducir un barco. Lo probé con mi amigo Teo en casa de su madre y, como eran números y no había ningún tipo de lógica emocional, simplemente lo estudié mucho, hice el test y lo envié.
Un día estaba entrando a los cines Ideal y me llamaron de un número americano. Me dijeron que Leslye quería hablar conmigo. Cuando me contactó por Zoom era mayo o junio y yo iba en bus a la Sierra a la piscina de una amiga. Como soy un desastre, se había olvidado de la llamada. [ríe]. Empecé a recibir mensajes: “El director está en Zoom, ¿dónde estás?” Iba en un autobús en Navalagamella.
Me bajé en una parada al azar, entré en la cafetería de una gasolinera y apoyé mi teléfono en una lata de Fanta que había comprado para poder sentarme. Cuando el director me preguntó dónde estaba pensé en mentirle, pero le confesé la verdad y ella se rió mucho. Ella me dijo: “Tú tienes el papel, me encanta que no me hayas mentido”. No me dijo nada sobre el personaje, solo que era una serie de Guerra de las Galaxias y mixto Congelado y Mata a Bill. Le respondí: “Puedo ser un árbol si quieres, no me importa”.
Ahora que sabemos que interpretas a Jecki Lon, ¿qué puedes contarnos sobre ella? ¿Has dominado el sable de luz?
Puedo decirte que es una padawan medio alienígena muy perfeccionista y organizada. Las primeras dos semanas no sabía que era un extraterrestre. De repente, empezaron a sacar spray blanco, cuernos. Tan pronto como me maquillé, ya sabía cómo caminaba, sabía cómo hablaba y se convirtió en un personaje mucho más inocente de lo que pensaba originalmente.
En cuanto a la lucha, entrenábamos durante meses con sables. Fue muy divertido, pero tuve dos problemas a la hora de filmar: o sonreía y me recordaban: “Dafne, no estás feliz. Deja de sonreír”, o hacía ruidos imitando el sable y tenían que avisarme. Si has sido fan de Guerra de las Galaxias Desde pequeña jugabas con un palo y hacías el “grum grum”, y se me escapaba [ríe]. También tuvimos clases para aprender a usar la Fuerza, fue surrealista.
El acólito Es una apuesta marcadamente femenina.
Eso es esencial. Es una historia de mujeres, escrita y dirigida por una mujer, y la mayoría del elenco son mujeres. Fue un rodaje muy bonito, con mucha hermandad. En producciones con muchas mujeres los hombres suelen intentar ser hipermasculinos para compensar, pero aquí no, todos nos llevamos muy bien.
Leslye es una fuerza de la naturaleza, Amandla Stenberg es increíble y muy buena amiga mía, era súper protectora conmigo y entrenaba peleas con Carrie-Anne Moss, de Matriz… Me cagó encima.
¿Cómo has afrontado el secreto de ¿Guerra de las Galaxias?
Recuerdo que, durante el rodaje, nos dieron iPads que tenían cuatro contraseñas. Si descargabas el script, tenías 24 horas para leerlo y desaparecía del iPad, era una barbaridad. Cada día te entregaban el texto impreso en un papel de un color especial para que no pudieras fotocopiarlo.
Y soy la peor persona tecnológica del mundo, no entendía los iPads. Cada semana les explicaba: “Volví a bloquear mi iPad. No he introducido la contraseña correctamente. “No puedo, renuncio”. Estuve allí ocho meses y no entendí los iPads en ningún momento.
¿Marvel te ha preparado para el fandom? guerra?
Tengo práctica de los proyectos en los que he estado, pero no hay nada como Guerra de las Galaxias. Sus fans son básicamente fans de la mente de George Lucas. Marvel es literatura, decenas y decenas de años de cómics, pero esta saga empezó con una película realizada con miniaturas y fondos pintados en los años 70. Me hace muy feliz ser una pequeña parte de esto.
Ahora que Wolverine llega al MCU, ¿hay futuro para X-23?
Adoro a Laura, es uno de mis personajes favoritos en todo el mundo. Lo extraño, me encantaría volver a hacerlo y tengo muchas ganas de verlo. Deadpool y Lobezno.
¿Quieres estar al día de todas las últimas novedades de películas y series? Suscríbete a nuestro boletín.
