En la primera visita de Estado a Países Bajos, la Familia Real Española busca potenciar la presencia empresarial española en el país y estrechar lazos
Plaza Dam Ámsterdam amaneció ataviada este miércoles para recibir el Reyes de España, que inician su visita de Estado, la primera de este año y también su debut en el Reino de la Naranjauna dinastía con la que mantienen vínculos desde hace años.
Don Felipe y doña Letizia llegaron la noche del martes a Ámsterdam y fueron directamente a reunirse con una representación de la comunidad española residente en el país. En ese momento, el Monarca dijo que esperaba que esta visita sirviera para incrementar la presencia de empresas españolas en Países Bajos.
Ya esta mañana, en la plaza Dam, las banderas españolas se intercalaban con las holandesas. A las puertas del Palacio Real colocaron una alfombra azul y una tribuna.
El cielo se despejó a las 10 de la mañana, cuando cuatro unidades del ejército holandés se formaron en la plaza. Veinte minutos más tarde, los cuatro reyes cruzaban la puerta principal de Palacio. La reina Máximo Eligió un traje color burdeos con sombrero en el mismo tono. Letizia, por su parte, lució un vestido verde jade, confeccionado en tweed del diseñador español Moisés Nieto, con un tocado marrón. Ellos, de traje.
Mientras interpretaban los himnos, un tambor de saludo del 41.a División de Artillería situado en la base militar de Oldebroek disparó salvas. Los Reyes recibieron el saludo de armas de MEA (Establecimiento Marino de Ámsterdam) antes de pasar revista a las tropas.
En la plaza se formó la guardia de honor del Palacio Real de Ámsterdam, que está vigilada las 24 horas del día ya que en el palacio se aloja un jefe de Estado extranjero. La guardia de honor siempre está formada por un regimiento de guardia. Esta vez, una unidad de 11 Batallón de Infantería (Asalto Aéreo) Garde Grenadiers y Jagers estacionado en el cuartel de Orange en Schaarsbergen.
La ceremonia de bienvenida en la plaza Dam estuvo a cargo del capitán de corbeta de la Armada. Gans de ARN. Allí se formó la banda sinfónica Koninklijke Militaire Kapel “Johan Willem Friso” (KMKJWF) del Ejército Real y un conjunto de banderas que incluían la bandera de la Armada y el Monograma del Rey Willem-Alexanders (WA). Esta es la primera vez que una bandera o estandarte dentro de las fuerzas armadas cuenta con este monograma.
Una vez revisadas las tropas y recibidas las delegaciones, los cuatro reyes entraron al palacio para intercambiar regalos. Después de permanecer allí durante una hora con las delegaciones, los monarcas caminaron por la plaza Dam hasta su extremo oriental para depositar una ofrenda floral en el Monumento a los Caídos, bajo una fuerte lluvia. Las tropas han formado un salón de honor por antigüedad y dos militares han colocado la ofrenda floral al pie del monumento. Al sonido de la corneta se guardó un minuto de silencio.
Hasta la cena de gala de esta noche los cuatro reyes no volverán a verse. Mientras doña Letizia y Máxima se preparan para la cita de la velada, Felipe VI y Guillermo Alejandro han acudido a visitar las instalaciones de la Fundación Cruyff y el puerto de Ámsterdam para conocer el proyecto del corredor marítimo del hidrógeno verde entre Bilbao y Ámsterdam.
