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CUALQUIERA
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Descripción enviada por el equipo del proyecto. Espinosa surge del deseo de tener un espacio donde puedan pasar cosas. En esa búsqueda aparece una bodega, escondida en Paternal, que antiguamente era una bodega, con una serie de edificaciones en su interior: una casa al frente convertida en oficinas, una casa choricera al centro, un gran entrepiso industrial, una estructura de concreto. sin mucho significado. Fue una gran suma de momentos y necesidades remendadas, todo bajo un gran techo de hojalata.
Algo de esa inesperada sucesión de espacios que originalmente tenía el lugar sigue existiendo en el proyecto: una calle interna que cambia de carácter y crea espacios diferentes. Esta calle lateral que va desde la acera hacia atrás, se comprime, se vuelve de doble altura, se convierte en un espacio semicubierto, y es un lugar en sí mismo. Puede funcionar como circulación y al mismo tiempo como espacio de permanencia, exposición y evento.
Todos los estudios están vinculados a esta calle, permitiendo y fomentando la interacción, la posibilidad de cruce, la colaboración. Los 7 espacios, con diferentes tamaños y calidades espaciales, están pensados para albergar actividades vinculadas al arte y el diseño. Una terraza en el primer piso genera un espacio exterior común y funciona como pulmón del proyecto. Esta perforación en el suelo y una serie de calados en el techo permiten que todo el conjunto tenga luz natural durante todo el día. La construcción de espinosa fue un proceso de experimentación, pruebas en sitio y búsqueda de materiales.
Hay un equilibrio entre el antiguo muro existente y el nuevo: cierres/divisores espaciales ligeramente industrializados. En Espinosa se respira un aire de sencillez, racionalidad y veracidad de los materiales. No hay decoraciones. Es como una pizarra en blanco para que sucedan cosas.