La decisión de General Motors de cerrar su planta en Colombia, Colmotores, implica el despido masivo de cerca de ochocientos empleados, para lo que necesitará la autorización del Ministerio de Trabajo.
En el comunicado en el que anunció su decisión, la empresa norteamericana aseguró que ya presentó ante la cartera las autorizaciones correspondientes para poder seguir adelante con “el despido colectivo de todos sus trabajadores por terminación total y definitiva del trabajo”.
Ahora puedes seguirnos en nuestro Canal WhatsApp y en Facebook.
Por su parte, el Ministerio de Trabajo aseguró que “garantizará la protección de los derechos laborales de los trabajadores de esta ensambladora de vehículos”, y anunció una inspección laboral de General Motors, que a su vez “tendrá un seguimiento riguroso para que se cumpla con el debido proceso” durante el despido de los trabajadores.
“Estamos comprometidos con la defensa de los derechos laborales, por ello he instruido a la Dirección de Inspección, Vigilancia y Control realizar una serie de visitas a la planta para inspeccionar las condiciones de trabajo y verificar que cumplan con los estándares exigidos por la ley”, dijo la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.
Asimismo, el Ministerio prevé convocar una mesa de diálogo social con las partes para revisar la situación de fondo y estudiar las mejores soluciones para los trabajadores.
Santiago Chamorro, presidente y director general de General Motors Sudamérica, indicó que la empresa ya desarrolló “un plan para cerrar contratos laborales con beneficios por encima de los requisitos legales, así como un amplio y sólido programa de reubicación laboral”.
Por su parte, el viceministro de Relaciones Laborales, Edwin Palma Egea, dijo: “Hemos sido informados que la empresa ha solicitado autorización al Ministerio para realizar un despido colectivo. Este proceso se tramitará conforme a la ley. Pedimos a la empresa que no abuse de su posición para forzar retiradas ‘voluntarias’”.
General Motors (GM) anuncia el cierre de sus plantas ensambladoras de Colmotores en Colombia y OBB en Ecuador, marcando el fin de casi siete décadas de operaciones en Colombia y ajustando sus operaciones en Ecuador a finales de agosto de 2024. La medida se alinea con una estrategia de transformación hacia la comercialización, venta y servicios postventa de vehículos en ambos países..
La decisión de General Motors, revelada el 26 de abril, implica el desmantelamiento de la planta de Colmotores en Colombia a partir de esta fecha y el cese de actividades en la fábrica de OBB en Ecuador alrededor de agosto de este año. La transformación responde a desafíos como la fragmentación del mercado y la subutilización de ambas plantas, que operaron muy por debajo de su capacidad, con Colmotores trabajando al 9% y OBB al 13%. La compañía pretende transitar hacia un modelo de empresas nacionales dedicadas a la comercialización, venta y servicio postventa de vehículos..
Además, General Motors afirmó que continuará ofreciendo autos de la marca Chevrolet en Colombia y mantendrá el programa de ahorro Chevyplan, además de preservar su presencia a través de empresas y negocios asociados como GMICA-Isuzu, GM Financial y sus socios comerciales. Este proceso de cambio incluye la solicitud de autorización para el despido colectivo de empleados ante el Ministerio de Trabajo, con el propósito de cumplir con la normativa laboral vigente y garantizar una adecuada transición de los trabajadores afectados.
La compañía también aseguró que evaluará diversas opciones para asegurar la introducción eficiente y sostenible de la próxima generación de vehículos en estos mercados, destacando la importancia de la adaptación estratégica a la dinámica cambiante del sector de la automoción.
