NUEVA YORK (Kyodo) — El asediado yen japonés continuó debilitándose hasta el rango de 158 frente al dólar estadounidense en Nueva York el viernes, cayendo a un nuevo mínimo de 34 años, después de que el Banco de Japón mantuviera intacta su actual política de flexibilización monetaria.
La moneda japonesa rondaba el rango superior de 155 antes de que el BOJ anunciara su decisión política. Pero las continuas ventas de yenes y compras de dólares enviaron la moneda japonesa por debajo de la línea de 158 en Nueva York, alcanzando brevemente 158,44, un nivel que no se había visto desde mayo de 1990.
A las 5 de la tarde en Nueva York, el yen se cotizaba a 158,32-42 por dólar, en comparación con 156,70-71 el viernes por la noche en Tokio.
El mercado advierte que las autoridades financieras japonesas podrían intervenir y provocar una caída del dólar de casi dos yenes durante un breve período hasta la zona superior de 154 yenes en Tokio el viernes.
Pero el yen pronto resumió su espiral descendente dado que el BOJ mantuvo su tasa de política y la compra de bonos, y el banco central continuó guiando las tasas de interés a corto plazo en un rango de cero a 0,1 por ciento.
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, dijo en una entrevista con Reuters el jueves que los tipos de cambio deberían ser determinados por las fuerzas del mercado y que la intervención monetaria es aceptable sólo en circunstancias excepcionales.
La brecha de tasas de interés entre Japón y Estados Unidos sigue siendo amplia incluso después de que el Banco de Japón hiciera su primera subida de tasas de interés en 17 años en marzo. La Reserva Federal de Estados Unidos guía su tasa de política entre 5,25 por ciento y 5,5 por ciento, y una reciente serie de datos mejores de lo esperado ha reducido las expectativas de que bajará la tasa pronto.
