20 de abril de 2024, 2:14 pm ET
Tras el doloroso golpe de la eliminación a manos del Real Madrid en la Liga de Campeones, el Manchester City se enfrentó al Chelsea en las semifinales de la Copa FA en un disputado partido que por la mínima dejó al equipo de Pep Guardiola como ganador.
El conjunto celeste llegaba muy cansado a este partido tras los 30 minutos adicionales que tuvo que disputar ante los merengues en el Etihad y que culminaron con su eliminación por penales, con un Lunin fenomenal.
La agotadora serie contra los españoles no sólo se saldó con esta caída, sino que dejó fuera de juego a Erling Haaland. que ni siquiera estaba en el banco de suplentes ante el Chelsea por una molestia física. Por su parte, los blues llegan a este partido invictos en ocho partidos y con un fantástico Cole Palmer que disputa el título de goleador de la Premier con el noruego de los Citizens.
El partido fue muy reñido e incluso vimos un poco de superioridad del Chelsea en la primera parte. La más clara estuvo en los pies de Jackson, que recibió un pase perfecto de Enzo Fernández y encaró en solitario a Ortega Moreno. Ya en zona de definición, el delantero no estaba lúcido, quiso regatear al ‘1’ pero el balón se le fue un poco largo, desperdiciando una oportunidad que era inmejorable.
El Manchester reunió a sus hombres de calidad e intentó hacer daño al Chelsea, pero entre la falta de creatividad y el buen bloqueo bajo del Chelsea anularon estas búsquedas.
Ya en el complemento, Jackson tuvo la llave del gol dos veces, pero volvió a desviarse. Conforme fueron pasando los minutos, el Chelsea empezó a sentirse más cómodo con el empate e incluso parecía que buscaba la prórroga, instancia en la que podía creer que tendría ventaja ante un rival exhausto.
Cuando el partido entró en los últimos diez minutos, el Manchester City Rompió el candado de la mano de un jugador que no tuvo su mejor versión: Bernardo Silva. Los portugueses tenían sed de venganza. Había fallado un penal en la tanda ante el Real Madrid con una definición que quedó en el ojo de la tormenta. Optó por patear al medio y Lunin, que se quedó de pie, tomó el balón sin dificultad.
Afortunadamente para el ’21’, su revancha llegó antes de lo previsto y definió un balón que flotaba en el área, lo metió al primer palo y desató la locura celeste en Wembley.
El Chelsea no tuvo capacidad de reacción tras el 1-0 del City y, aunque tuvo casi 20 minutos para intentar empatar, el resultado no avanzó más.
Con esta victoria, Manchester City regresó por segundo año consecutivo a la final de la Copa FA y definirá al campeón ante el ganador de la serie entre Manchester United y Coventry City. ¿Habrá un clásico urbano entre el rojo y el celeste?
