- Por Matt McGrath
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1 hora antes
Los científicos dicen que el poderoso fenómeno climático de El Niño, que junto con el cambio climático ha contribuido a elevar las temperaturas globales a nuevos máximos, ha terminado.
La Oficina Australiana de Meteorología dice que el Océano Pacífico se ha “enfriado sustancialmente” la semana pasada.
Este episodio natural que comenzó en junio pasado trajo aguas más cálidas a la superficie del Pacífico, añadiendo calor adicional a la atmósfera.
Pero lo que sucederá después es incierto, dicen los investigadores.
Los científicos dicen que los meses posteriores al fin de El Niño darán una fuerte indicación de si las altas temperaturas recientes se deben o no al cambio climático acelerado.
Cada pocos años, la aparición de El Niño provoca cambios dramáticos en el clima en muchas partes del mundo.
La aparición de agua más cálida que sale a la superficie frente a las costas de Perú en América del Sur está relacionada con el aumento de sequías e inundaciones en diferentes partes del mundo.
El nombre completo del patrón es El Niño-Oscilación del Sur o ENOS.
Está marcado por tres fases diferentes: El Niño cálido, condiciones neutras o un período más frío llamado La Niña.
Este El Niño actual fue declarado el pasado mes de junio y alcanzó su punto máximo en diciembre.
El agua más cálida resultante en el Pacífico ha ayudado a elevar las temperaturas promedio globales a nuevos máximos, y en marzo se batió por décimo mes consecutivo el récord de ese período.
Pero ahora, quizás más rápido de lo esperado, El Niño ha desaparecido.
La pregunta crítica es qué sucederá después y sobre esto los científicos están divididos.
Investigadores estadounidenses dijeron recientemente que había un 60% de posibilidades de que se desarrollara La Niña entre junio y agosto, y un 85% de posibilidades de que esto ocurriera en otoño.
Pero la Oficina Australiana dice que tales declaraciones deben tratarse con cautela. Esperan que las condiciones neutrales duren al menos hasta julio.
Señalan el actual estado caliente de los océanos globales que creen que está afectando a ENSO.
“Como las condiciones oceánicas globales actuales no se han observado antes, las inferencias sobre cómo se podría desarrollar ENSO en 2024 que se basen en eventos pasados pueden no ser confiables”, dijeron en un comunicado.
Según los investigadores, realmente importa si se forma o no La Niña.
Puede tener un impacto significativo en tormentas y huracanes, y algunos expertos predicen que si llega La Niña, presagiaría una temporada de huracanes muy activa en el Atlántico.
El efecto de enfriamiento de La Niña también puede desacelerar ligeramente el ritmo del calentamiento global.
Eso podría indicar que las temperaturas récord experimentadas durante el año pasado eran algo así como un misterio, y no evidencia de que el mundo haya entrado en una fase más rápida de calentamiento.
