10 de abril de 2024
La investigación se llevó a cabo en el Tribunal Forense de Reading el martes.
El abuso de óxido nitroso contribuyó a la muerte de un estudiante, concluyó un forense.
Ellen Mercer, de 24 años, murió en el hospital en febrero de 2023, dos semanas después de que la dejaran postrada en cama quemándose las piernas con un bote de gas de la risa.
La forense principal de Berkshire, Heidi Connor, descubrió que la muerte de Mercer fue causada por su abuso de sustancias y un coágulo de sangre.
El óxido nitroso se utiliza habitualmente como analgésico en medicina y odontología. Cuando se mezcla con oxígeno, se lo conoce como “gas y aire”, lo que puede ayudar a reducir el dolor durante el parto.
Una investigación en el Tribunal Forense de Berkshire en Reading encontró que la Sra. Mercer inhalaba dos o tres “botellas grandes” al día.
La llevaron al Hospital Wexham Park en Slough el 9 de febrero de 2023, pero murió al día siguiente.
La investigación escuchó que un examen post mortem encontró que su muerte fue causada por un tromboembolismo pulmonar bilateral, una trombosis venosa profunda y “complicaciones a largo plazo por el uso de óxido nitroso”.
La señora Connor dijo que el abuso era una “causa importante” de su inmovilidad.
“La muerte de Ellen Mercer fue causada por el abuso de óxido nitroso y la inmovilidad que llevaron al desarrollo de una embolia pulmonar”, dijo.
“Este caso ha puesto de relieve lo enormemente peligroso que es utilizar óxido nitroso”.
A un técnico de emergencias médicas que asistió a la casa de la Sra. Mercer le dijeron que no había podido caminar ni ir al baño durante quince días después de que se le derramara un bote de gas en las piernas.
Michaela Kirtley dijo que encontró una habitación “desnuda”, donde había un edredón “muy manchado” sobre la cama.
Para ella estaba claro, dijo, que Mercer era vulnerable.
Le habían diagnosticado trastorno bipolar, pero las autoridades no realizaron un seguimiento de una revisión de salud mental, según la investigación.
En el hospital, el personal no realizó una prueba que podría haber revelado que la señora Mercer tenía un mayor riesgo de desarrollar un coágulo de sangre.
Pero la señora Connor concluyó que eso no causó la muerte de la señora Mercer.
