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Los precios al consumidor en Estados Unidos aumentaron más rápido de lo esperado el mes pasado, en una señal de que la lucha para frenar la inflación se ha estancado.
Los precios aumentaron un 3,5% en los 12 meses hasta marzo, frente al 3,2% de febrero, dijo el Departamento de Trabajo de Estados Unidos.
Los mayores costos de combustible, vivienda, comidas fuera de casa y ropa impulsaron el aumento.
Los analistas advirtieron que la falta de progreso obligará al banco central estadounidense a mantener las tasas de interés altas por más tiempo.
Las tasas de interés más altas ayudan a estabilizar los precios al encarecer el endeudamiento para expansiones empresariales y otros gastos. En teoría, eso a su vez desacelera la economía y alivia las presiones al hacer subir los precios.
Pero la tasa de interés clave de la Reserva Federal está ahora fijada en los niveles más altos en más de dos décadas, en el rango de 5,25%-5,5%.
Los pronosticadores esperaban que el banco comenzara a reducir los costos de endeudamiento este año, lo que refleja el hecho de que la tasa de inflación, que sigue el ritmo de los aumentos de precios, ha caído significativamente desde que alcanzó el 9,1% en 2022.
Pero los datos económicos recientes, incluidas las sólidas cifras de creación de empleos de la semana pasada, han generado dudas sobre qué tan pronto podrían producirse esos recortes.
Los analistas, que alguna vez esperaban recortes de tasas a partir de marzo, han estado revisando rápidamente sus apuestas, y muchos ahora no esperan nada hasta finales de este verano y algunos predicen que el banco podría esperar hasta el próximo año.
Lo que la Fed decida hacer probablemente moldee las decisiones de los banqueros centrales de todo el mundo, dijo Neil Birrell, director de inversiones de Premier Miton Diversified Funds.
“La Reserva Federal tiene algunos problemas que resolver y si otros bancos centrales estaban esperando a que la Reserva Federal actuara, ahora tienen un enigma entre manos”, dijo.
La inflación se enfrió rápidamente a lo largo de 2023 a medida que se resolvieron los problemas de suministro de la era de la pandemia y se desvaneció el aumento de los precios de los alimentos y la energía provocado por la guerra en Ucrania, pero aún sigue siendo superior al objetivo del 2% del banco.
Un repunte de los precios del petróleo en los últimos meses también ha elevado los costos de la energía, mientras que los precios de los servicios muestran pocas señales de estabilizarse.
El Departamento de Trabajo dijo que los precios aumentaron un 0,4% de marzo a febrero, lo mismo que en febrero.
Los mayores costos del petróleo y la vivienda representaron más de la mitad del aumento.
También contribuyeron el seguro de automóvil, la atención médica y los costos de Internet.
La llamada inflación básica, que los economistas consideran un mejor indicador de las tendencias futuras porque no incluye los precios más volátiles de los alimentos y la energía, se situó en el 3,8%, la misma que en febrero.
“No deberíamos reaccionar de forma exagerada ante el salto de la inflación general, que se debe principalmente a la energía”, dijo Brian Coulton, economista jefe de Fitch Ratings. Pero añadió: “Los detalles no son nada tranquilizadores para la Reserva Federal”.
