Este martes, el Municipio de San Luis destruyó 291 tubos de escape adulterados en el Corralón Municipal. Fue la cuarta compactación de este tipo de dispositivos, que desde 2021 acumula 1.429 en total, año de sanción de la ordenanza que los prohíbe.
En el procedimiento participaron el secretario de Transporte y Prevención Ciudadana, Facundo García; la secretaria de la Asociación Autismo de San Luis, Johana López; y el Juez de Faltas Municipales, Alejandro Ferrari.
“Son 291 los que han sido secuestrados desde mayo hasta ahora. Decidimos cerrar nuestra gestión municipal con un monto importante como este, sabemos que es beneficioso y que alegra a los vecinos de la ciudad de San Luis. Recordemos que el ruido de estos tubos de escape afecta mucho a niños autistas, veteranos de Malvinas y mascotas, y qué mejor que sacarlos de las calles”, dijo García.
Al igual que la pirotecnia sonora, el ruido de estos tubos de escape afecta a las personas autistas, provocando irritabilidad, nerviosismo, miedo o ansiedad; algunos incluso sienten la necesidad de buscar un lugar tranquilo y seguro.
“Al igual que ocurre con la pirotecnia sonora, emiten un ruido invasivo y perturbador. Una madre que va caminando con su hijo de la mano, y aparece una moto con este caño, con su sonido invasivo, si no lo tengo apoyado, ese niño sale corriendo, con el peligro que eso significa”, explicó López.
En julio de 2021 se compactaron 378 tubos y en mayo de 2022 otros 376. Este año, en mayo, se destruyeron 384, lo que sumado a las 291 unidades de este martes alcanza hoy un total de 1.429 tubos de escape destruidos desde la sanción de la regulaciones.
Prensa Municipio de San Luis/ALG