Privacy Policy Banner

We use cookies to improve your experience. By continuing, you agree to our Privacy Policy.

La nueva página colombiana »al oeste -.

La nueva página colombiana »al oeste -.
La nueva página colombiana »al oeste -.
-

“La nueva página que se escribirá en Colombia será escrita por jóvenes que quieran estar libres de confrontación, violencia, amargura, envidia y tristeza. Colombia será diferente”.


La degradación de la política en Colombia alcanzó un punto con Gustavo Petro en el poder donde la grosería, la corrupción, todo válido, improvisación y confrontación son los “principios” necesarios para viajar en la vida política y electoral.

Hoy, en toda Colombia, hay un aire de ira, odio, resentimiento, envidia, venganza y, desafortunadamente, destrucción. Prácticamente el gobierno de Petro quiere en el país que haya una confrontación civil con tantos muertos que reciba la orden republicana y el establecimiento de un régimen penal.

Del gobierno de Petro y el presidente Gustavo no hay, en cuanto a mí, un adjetivo calificado positivo. Como ya he mencionado en múltiples columnas anteriores, Petro es el hombre que llegó al poder para destruir Colombia y está ampliamente documentado en mis opiniones. Ahora es el momento de reflexionar en el país que queremos y en los aspectos importantes para mejorar.

Sin lugar a dudas, es el momento en que Colombia requiere un presidente para 2026 lo que está claro que la confrontación es que la enfermedad se cura y que el medicamento no es más dosis de enfrentamientos ideológicos sino la receta de educación, sentido común y coexistencia.

Colombia ya ha experimentado gobiernos que han hecho y deshecho con las personas todo lo que querían. Ha habido administraciones en el siglo XXI muy buenas, por ejemplo, los gobiernos de Álvaro Uribe, donde Colombia recuperó confianza y esperanza, pero después de él, todos han sido malos y malos.

Estamos, en este momento, en el peor gobierno de lo peor. Es hora de realmente. Si el país no decide bien en 2026, estoy , vendrán años de dolor y mucho sufrimiento. Los verdaderos protagonistas de las próximas elecciones serán jóvenes y son los que deben cambiar el curso de este país.

Si los jóvenes, es decir, mi generación, toma las riendas del futuro de Colombia y decide decir “no” a la confrontación inútil entre los políticos, para pensar y comprender que cada uno posee su destino y que no dependemos, excepto nuestras habilidades, estoy seguro de que podemos ahorrar un país que está en un cuidado intensivo.

-

Qué hermoso sería que el resultado de las próximas elecciones estuviera en manos del trabajo de los jóvenes, es decir, que cada joven, en sus hogares, sean sus familias, tuvieran diálogos permanentes y expusieron sus verdaderos deseos y, en consecuencia, motivaron y convencieron a muchos para elegir un cambio de esperanza y progreso.

Estoy seguro, porque lo vivo y lo he visto, que la gran mayoría de los colombianos están cansados ​​de la política que vive el país hoy. Estamos cansados ​​de que tengamos todos los días, porque la situación nos obliga a estar de un lado o por el otro, que si no está en uno está en el otro y si alguien no está en alguno, entonces es un poco débil sin razón o lo son. Eso es lo que Colombia se ha sumergido en el atraso y la amargura.

Las personas necesitan oportunidades, educación, salud, recreación, seguridad y no tantos políticos a los que les gusta hablar y decir latas para satisfacer sus egos de poder y no resolver nada. No podemos dejar a los políticos el futuro de nuestras vidas, los políticos deben permitir que las personas vivan sus vidas y no se truncen y destruyan. Actualmente estamos viendo eso.

Queremos un árbitro que esté en el campo de la democracia sin intervenir en la vida privada de las personas. Que es solo para que las cosas funcionen para los jugadores, es decir, para que la justicia los alcance por igual, que la salud está garantizada y la educación, ese dinero “público” se maneja con pinzas y que no se pierden como agua entre las manos de los corruptos.

Colombia debe aprobar la página de confrontación y odio y construir una nueva página de nuestra donde los individuos y no los políticos son protagonistas. La gente realmente debe ser libre, debemos romper las cadenas que nos oprimen, las cadenas del odio al amargura y la tristeza.

Quiero una colombia diferente y, donde sea que esté, estoy en la orden para ayudar.

Este es mi sentimiento y el de la gran mayoría de los jóvenes y los colombianos.

-

-

-
NEXT Madre e hijo murieron en un crecimiento en Medellín -.