Si hubo un jugador que vivía con tensión especial esta reunión del jueves entre Fiorentina y Betis (2-2) fue Ranieri, capitán del equipo italiano. El defensor, que anotó en el partido de ida, intentó bromear de Adrián San Miguel en su propia cara.
Como se hizo anteriormente con jugadores como Antony o Aitor Ruibal, Ranieri aprovechó el pitido final para enfrentar a Fran Vienitas, incluso golpeando las cabezas en una imagen más típica de una pelea que en un encuentro de fútbol.
-Adrián San Miguel, que conoce bien el éxito y las derrotas, fue rápido No hay lugar.
Aunque el antiguo Liverpool trató de no ingresar a las controversias, mientras que los Vieites gritaron, Ranieri insistió en la discusión, una situación que terminaría cuando Adrián San Miguel, con un gesto con la mano, se despidiera del defensor.
La experiencia de San Miguel.
Aunque Adrián San Miguel no jugó un solo minuto en el partido, el gol también jugó su papel. Con la Fiorentina buscando el empate, el portero saltó varias veces al campo para calentarse a pesar de que sabía que Fran Vieites estaba ganando tiempo, dando credibilidad a posibles lesiones, y no dejó de apoyar en ningún momento de la banda.
En este equipo, como sucedió con el lesionado Llorente y Marc Roca, todos juegan, todos empujan y todos apoyan al resto de los compañeros de clase en busca de un título que sería histórico no solo para el club, sino también para toda España.