Entre Armando Benedetti y Aida Merlano hubo una conversación sobre un tema que mantuvo despierto a más de uno en el poder: el regreso de la excongresista a Colombia. El parlamentario era, a octubre de 2019, la pieza clave para armar el rompecabezas de la corrupción electoral en la Costa Atlántica. Había sido condenada a 15 años por comprar votos y amenazó con atacar a un fan sin antecedentes, lo que no dejaría una marioneta en su cabeza. Sin embargo, en esa fecha, Merlano protagonizó una de las fugas más cinematográficas de la historia del país.
El exsenador del Partido Conservador, entonces de 43 años, llegó pasadas las 10:00 de la mañana a una clínica dental del norte de Bogotá. Fue trasladada con un esquema de seguridad desde el penal del Buen Pastor y allí conoció a sus dos hijos. La mujer había aceptado hacerse un diseño de sonrisa. Luego de cuatro horas de estar en este procedimiento, la mujer ató una cuerda a la ventana y saltó a la calle, donde un hombre disfrazado de ama de llaves se la llevó.
Su destino, tras esa fuga, fue Venezuela. Pero meses después, en enero de 2020, la Fuerza de Acciones Especiales de Venezuela confirmó su captura en ese país. En su momento, Colombia había roto relaciones con el gobierno de Nicolás Maduro, y por ese y otros giros judiciales, Merlano permaneció durante años en ese país como detenido. Ella, por su parte, no tenía ningún interés en regresar.
El triunfo de Gustavo Petro la llenó de entusiasmo, como muestra SEMANA en un vídeo publicado en la más reciente edición. Merlano mantuvo comunicación con Armando Benedetti, el entonces embajador en ese país.
SEMANA En su última edición publicó algunos audios en los que se evidencia el tono de las conversaciones que sostuvieron y cómo Merlano advierte constante y vehementemente al embajador que si el gobierno permite su deportación a Colombia ella “sacará la artillería”.
Desde Roma, Benedetti envió una comunicación a SEMANA en el que asegura que se reunió con el exsenador en sus funciones diplomáticas. “Al momento de los hechos yo me encontraba como embajador en Venezuela y como testigos de la conversación con ella y de cómo sucedió todo fueron funcionarios de la Embajada, quienes acudieron a mi solicitud, temiendo que ocurriera una emboscada, y quienes “Podemos confirmar la mala fe de sus intenciones”, afirma.
Escuche los audios de Armando Benedetti y Aida Merlano
Benedetti añade que “La reunión se realizó ante su insistencia” y que “debido a la difícil situación en la que se encontraba accedí a recibirla. Sin embargo, Lo que se sabe hoy confirma que se trató de una emboscada para obtener una grabación ilegal y manipulada.”. Las palabras del hoy embajador ante la FAO contradicen lo que se escucha en las conversaciones en las que le dice, una y otra vez, que ya habló con el presidente Petro al respecto. “Ya te lo dije, ya te lo dije”, le dice en un aparte de la charla.
La historia de esos enfrentamientos, ocurridos antes y después de la deportación de Merlano, se cuenta en la última edición de SEMANA. Estas son las frases más reveladoras de ese cruce entre el exsenador y el embajador.