La proteína que tiene múltiples beneficios para la piel y especialmente para las articulaciones es el colágeno.
Para José Luis Uliaque, científico y director de Nutilab, “el colágeno proporciona al cartílago articular resistencia a las presiones de envío que se producen cuando las articulaciones se mueven”.
Además de aportar elasticidad y resistencia a los tendones en los estiramientos presentes en la actividad muscular y ósea.
Este caldo, según detalla El Cronista, ayuda a conservar la elasticidad de la piel y aporta firmeza, además de ayudar a retrasar la aparición de arrugas y flacidez.
Quienes lo han consumido dan fe de que aporta nutrientes a uñas y cabello y que también puede ayudar a mejorar el aspecto general de la piel.
Para preparar este caldo de huesos casero debes tener:
- agua abundante,
- hueso de res
- huesos de cerdo
- Hueso o punta de jamón
- hueso de caña
Preparación
Para ello debes lavar los huesos, colocarlos en una bandeja de horno y calentarlos a 180ºC durante 15 minutos.
En una olla debes colocar unos 4 litros de agua, agregar los huesos tostados y cocinar durante seis horas a fuego lento.
Recuerda que a medida que se cocinan debes retirar la espuma y el exceso de grasa con ayuda de un colador. Pasadas las seis horas, retiramos los huesos y colamos el caldo.
Déjalo enfriar y guárdalo en el congelador, para que puedas sacar porciones y consumirlas cuando quieras.