Cuando la familia Gilinski se propuso conquistar Grupo Nutresa el 10 de noviembre de 2021, a través de una oferta pública de acciones (opa) en la que propusieron pagar $7,71 por acción en ese momento, casi 50 por ciento más que el precio registrado en la bolsa de valores en ese momento. En aquel momento, era clara la intención de fortalecer la organización para convertirse en la primera multinacional de origen colombiano, según afirmaron los inversores, algo que harían realidad con el apoyo y la experiencia en el sector alimentario de su socio árabe, el Holding Internacional. Co. (IHC).
Según confirmó EL TIEMPO con fuentes del mercado, Los Gilinski venderán las ocho unidades de negocio por separado en transacciones que esperan cerrar este año. De hecho, ya están analizando algunas propuestas de inversionistas de Estados Unidos, Europa, México y Brasil, lo que les hace suponer que podrían recibir alrededor de 12 mil millones de dólares. 3,5 veces más de lo que pagaron por todo el grupo, del que hoy tienen el 99,4 por ciento.
Al interés por los activos de dicha organización se sumó esta semana algunas empresas de alimentos de origen español que solicitan información sobre los negocios de Nutresa en venta.luego de que se conociera la intención de los Gilinski de segmentar el recién adquirido grupo, según confirmó a esta editorial una firma especializada en facilitar este tipo de procesos en el país.
que esta a la venta
Hoy, esta organización empresarial cuenta con ocho unidades de negocio en los segmentos de chocolates, galletas, helados, carnes, café, pastas, bebidas frías (Tresmontes Lucchetti) y alimentos de consumo, con marcas como Starbucks y El Corral, entre otras.
Son más de 63 marcas las que comercializa a través de estas unidades en 18 países, desde Estados Unidos hasta Chile, en los que tiene instalada una red de 46 plantas productivas, la mayoría de estas (29) en Colombia.donde también tienen su centro de operaciones y genera cerca del 60 por ciento de sus ventas totales.
Sólo el año pasado, en medio de turbulencias económicas, Grupo Nutresa vendió cerca de 19 mil millones de pesos, mientras que las ganancias sumaron más de 720.000 millones. La empresa, a través de sus unidades de negocios, tiene una participación de mercado consolidada del 50,2 por ciento en el país, señala un informe.
Cambio de estrategia
¿Pero qué oportunidad ven hoy los dueños de Nutresa que quizás no atendieron en su momento en el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA)?
Para algunos expertos en fusiones, compras y ventas de empresas en el país, en el mundo empresarial todo es una oportunidad, aunque en esta operación en particular puede haber incluso aspectos culturales muy propios de la idiosincrasia antioqueña.
“Aquí hay varias consideraciones importantes. Uno de ellos es una cuestión cultural y es que el GEA tenía una noción de cohesión empresarial y no estaba en su idea separar aquellas operaciones que generaban valor social integradas en una sola organización. y con un gobierno corporativo especial que los empoderó en todos los ámbitos”, explicó.
“Hoy las empresas multinacionales tienen sus negocios muy enfocados, las que hacen galletas no les interesa estar en el negocio de la carne, por ejemplo, entonces la manera de maximizar valor no es mirar a Nutresa como un holding sino como una empresa microsegmentada en su vertical. Entonces lo que termina pasando es que las empresas que operan en determinados negocios compran lo que realmente les interesa y potencian sus mercados y lo que finalmente lleva es maximizar el valor de la estructura”, comentó.
Mauricio Rodríguez Múnera, experto en Liderazgo y Alta Dirección y profesor de varias universidades, señala que: “Gilinski tuvo la capacidad de identificar una excelente empresa con una acción muy subvaluada y la audacia de comprarla en un momento de gran incertidumbre por la turbulencia política, social y económica que vive Colombia desde el estallido social”.
Sin embargo, no cree que estos activos puedan venderse por 3 o 4 veces el precio que pagó por la organización, aunque no duda de que él y sus socios árabes obtendrán enormes beneficios.
Impacto en el país
“Sin duda los Gilinski compraron un negocio muy barato y ahora van a salir a vender rápido, segmentado y cuando la empresa haya adquirido un valor relevante, estrategia que les dejará buenas ganancias”, dijo el experto en adquisiciones y fusiones consultado, quien agregó que esta operación llevará a reflexionar sobre cómo un mercado tan ilíquido como el colombiano puede afectar el valor de un activo que termina comprándose en el mercado de capitales muy barato.
También se destaca que si los inversionistas de estas unidades de negocios son diferentes, el resultado será una cultura corporativa diferente y esto traerá una mejora importante al aparato empresarial colombiano en términos de gobierno corporativo y en la forma de ganar eficiencias.
“Para efectos del mercado colombiano hay algo interesante, porque así como las OPA fueron los negocios de 2022 y 2023, la venta de estas unidades serán los grandes negocios de 2024 y 2025 y eso lleva a un posicionamiento empresarial muy interesante. del Grupo Gilinski. Bueno, lo deja en una posición de efectivo muy interesante. No se puede ignorar que son inversionistas muy inteligentes, astutos, y sin duda habrá algún negocio local, regional o internacional que luego les llame la atención”, afirmó la fuente.
Rodríguez Múnera, por su parte, sostiene que en Colombia hay varias empresas cuyo precio de mercado es inferior a su valor en libros, lo cual es muy atractivo, considerando que son firmas muy sólidas y muy bien administradas.
“Es posible que en los próximos años veamos a más inversores con el apetito de riesgo de Gilinski comprando acciones baratas, apostando por una Colombia próspera en la era post-Petro”, señaló el experto.