(CNN)— Cuando se trata de construir aviones, el director ejecutivo de Boeing, Dave Calhoun, es partidario de racionalizar los costos. Calhoun, contador de formación, ha priorizado la disciplina fiscal en sus cuatro años al frente, apretándose el cinturón para liberar flujo de caja y colocar a la empresa en una mejor posición financiera.
Pero cuando se trata de vivir el estilo de vida de un director ejecutivo, esa naturaleza ahorrativa desaparece.
Vea aquí: Boeing informó en una presentación regulatoria que cuatro altos ejecutivos, incluido Calhoun, ganaron medio millón de dólares adicionales en viajes personales en jet privado a expensas de la compañía que previamente habían sido registrados incorrectamente como viajes de negocios, escribe mi colega Chris. Isidoro.
Este error fue descubierto en una revisión interna, impulsada por una investigación del Wall Street Journal el año pasado sobre los viajes en aviones privados realizados por ejecutivos de Boeing, informó el periódico el jueves.
Para ser claros: Boeing exige que Calhoun, que dejará el cargo a finales de este año, utilice sus aviones privados para viajes personales y de negocios por razones de seguridad. Y eso es bastante normal.
Si vuela desde la sede de la compañía en Arlington, Virginia, a sus instalaciones de fabricación en las afueras de Seattle, el avión se considera un beneficio del trabajo. Pero cuando un director ejecutivo utiliza el avión de la empresa para unas vacaciones familiares, eso normalmente cuenta como ingreso imponible.
El Servicio de Impuestos Internos es muy estricto en estas cosas y recientemente anunció que tomaría medidas enérgicas contra los ejecutivos que hayan estado informando ilegalmente viajes personales como gastos comerciales. No hay evidencia de que alguien en Boeing estuviera haciendo eso, pero la represión indica que está sucediendo con cierta regularidad en las empresas estadounidenses.
En los últimos tres años, Calhoun acumuló 979.000 dólares en viajes aéreos personales, según la compañía. Boeing no hizo comentarios más allá de la información contenida en la presentación.
Por qué es importante para Boeing
En todo lo que se habla sobre el desastroso comienzo de Boeing en 2024, apenas hemos tenido tiempo de hablar de la crisis que se avecina en el horizonte: una posible huelga de su mayor sindicato.
Un contrato de 10 años que cubre a 30.000 maquinistas del área de Seattle vence el 12 de septiembre. Las negociaciones comenzaron el mes pasado, pero se retrasaron para darle a la compañía un respiro mientras se ocupaba de múltiples investigaciones federales sobre la explosión del tapón del fuselaje del 5 de enero.
Los maquinistas quieren un aumento salarial del 40% en tres años y un puesto en la junta directiva.
Va a ser bastante incómodo para la gerencia de Boeing tratar de defraudar a las personas que construyen los aviones mientras prodiga a Calhoun con un pago de casi 33 millones de dólares el año pasado (un aumento del 45% con respecto a 2022). , están preparando su paquete de jubilación de 45 millones de dólares y evitando preguntas sobre los viajes del jefe entre sus dos casas, ninguna de las cuales se encuentra cerca de la sede de la empresa.
“Con lo que está sucediendo hoy, a menudo somos la última línea de defensa y tenemos que salvar a esta empresa de sí misma”, dijo el presidente del sindicato, Jon Holden, al Financial Times la semana pasada.
