Él Asamblea Concentus BA, bajo la dirección de su creador, Ricardo Sciammarella, abordará un ciclo de cuatro conciertos en torno al Clasicismo y sus ramificaciones. Una historia articulada a partir de obras de Haydn, Mozart, Gluck y Beethovencon la participación de numerosos invitados, no sólo solistas, sino también dramaturgos y artistas plásticos que sumarán intervenciones. Romántico y revolucionario es el nombre del ciclo que comenzará el martes a las 20 y se extenderá hasta el 10 de septiembre en el Teatro Avenida (Avenida de Mayo 1222).
Franz Joseph Haydn será el protagonista del primer concierto. “Un vienés en Londres”, como título del programa, incluirá, además de la Obertura de la ópera armida y el Sinfonía n.° 104 en re mayor “Londres”el estreno en Argentina de “Scena di Berenice”, un aria dramática de concierto sobre un momento de Antígono, de Metastasio estrenada en 1795 en la capital británica junto con la “Sinfonía 104”. “Aquí es prácticamente desconocida esta aria que Alejandra Malvino interpretará por primera vez como soprano. Es un momento absolutamente trascendental de Haydn, de formidable profundidad psicológica y tensión dramática”, destaca Sciammarella en diálogo con Pagina 12.
El primer programa de la serie también contará con un intervención dramática sobre textos y dramaturgia de Betty Gambartes y Diego Vila, con un diseño de iluminación de Roberto Traferri y la participación de Néstor Caniglia como narrador. “El año pasado pensamos Diálogosalgo así como visitas entre la literatura y el concierto, en las que presentamos Mozart camino a Praga, sobre el texto de Morike y este año surgió lo que creo que es la consecuencia lógica. con este ciclo Romántico y revolucionario Investigamos estas características en compositores como Hayd, Mozart Gluck y Beethoven”, dice Sciammarella y añade: “Los textos no son ficción. Nada de lo que se dice no pasó. Pero están bellamente elaborados, de modo que no es una lección de historia, sino más bien una historia interesante”.
El mismo aparato dramático, con los mismos arquitectos, se pondrá en juego en el segundo concierto, basado en el Réquiem de Mozart, que se llevará a cabo el martes 16 de julio. Silvina Patryna, Sarah Migliori, Ricardo González Dorrego y Víctor Torres serán los solistas, además del Grupo de Canto Coral dirigido por Nestor Andrenacci. “El Réquiem es una de esas obras misteriosas de la historia de la humanidad, aunque su creador no pudo terminarla, tuvo una influencia notable, particularmente en el siglo XX, atrayendo a coreógrafos y bailarines y a un compositor como Gyorgy Ligeti, hasta convertirse en una de las obras con mayor arraigo en la cultura occidental. uno habla de Réquiem de Mozart y de algún modo todo el mundo lo entiende”, afirma Sciammarella.
Un músico relegado de la dinámica instrumental del Clasicismo como Christoph Willibald Gluck se encuentra con Mozart, en el tercer programa, previsto para el 15 de agosto. “Las Máscaras de Don Juan” incluirá el Suite del ballet Don Juan, de Gluck, otro estreno en Argentina del Concentus BA Ensemble, y la Sinfonía Concertante K 364 y la Sinfonía 541 “Júpiter”, de Mozart. “Gluck es uno de los músicos importantes de su tiempo, que está en la base del romanticismo de Berlioz, por ejemplo. Hacer su ‘Don Juan’ tiene sentido y no sólo como guía para Mozart”, reflexiona Sciammarella. “La suite de ballet me pareció una buena idea, sobre todo porque lo que sigue es uno de los dúos de amor más formidables de la música occidental, que es la ‘Sinfonia Concertante K 364 para violín y viola’. En esta oportunidad vendrá a tocar con nosotros la violinista Lina Tur Bonet, gran músico historicista. uno de los mayores especialistas en música barroca de estos tiempos, además de contar nuevamente con Pablo Saraví, en viola. Poder contar con estos solistas es una gran motivación para el crecimiento del conjunto”, continúa el director.
Al cierre del ciclo, el 10 de septiembre, se interpretará la Sinfonía n.º 3 op. 51 “Heroica”, de Beethoven, dialogará con la pintura de Eduardo Hoffmann. “El artista plástico busca correspondencias entre su modernidad, su siglo XXI, con una obra aún actual”, se entusiasma Sciammarella. “Hoffman es un pintor abstracto y eso me fascina, porque no puedo imaginar esa música poderosa en diálogo con el arte figurativo. El poder de la ‘Tercera’ de Beethoven es tan grande que no podría vincularse a una imagen definida, sino a una fuerza colosal. Es como una de esas figuras de Miguel Ángel que parecen salir rompiendo la piedra. También aquí la música trasciende la forma”, añade.
“’Romántico y revolucionario’ tiene que ver con la música que elegimos y la forma en que la presentamos, pero también con nosotros, que abrimos caminos y seguimos siendo utópicos en un mundo como el que vivimos”, concluye Sciammarella. “Con Concentus BA nos esforzamos mucho en recrear una dialéctica, una forma de pronunciar… Para eso utilizamos los instrumentos del siglo XVIII, con sus virtudes y defectos. Son diferentes, en afinación y en concepto, y eso es lo que hace que nuestra aventura sea emocionante”.
