El Ministro de Economía, Luis Caputo, Este martes culpó a la oposición por la subida del dólarNegó que hubiera una crisis y expresó confianza en la aprobación de un desembolso de US$ 800 millones por parte de la Junta Directiva del Fondo Monetario este juevesmientras promete un nuevo programa con la organización, en medio de tensiones cambiarias e incertidumbre sobre la Ley de Bases que se discutirá este miércoles en el Senado.
“Lo que pasó en el mercado es que La política va a intentar interponerse en el camino., pero no te dejes atrapar por eso. La macroeconomía está ordenada”, afirmó en el Hotel Hilton.No te comas la historia, Tenemos superávit fiscal, comercial y de cuenta corriente, la situación es mucho más sólida, es una oportunidad histórica, no hay excedente de pesos para hacer daño”, dijo durante un evento organizado por la Fundación Libertad y Progreso.
Consultado sobre las tensiones cambiarias, Caputo se mostró optimista. ““No me asusta, no habrá crisis”., sostuvo. “En su totalidad es achacable a la política, es una pena porque mayo fue un mes espectacular, antes de esto ataque político, El riesgo país estaba en 1.200 puntos y el dólar en $1.100, hubo un superávit fiscal récord y la inflación bajó a la mitad respecto a abril”, explicó, y afirmó que la mejora de las condiciones financieras “se demoró, nada más”.
En una jornada en la que todas las cotizaciones paralelas subieron, con el blue en los $1.300 y el CCL superando esa marca, el ministro admitió que “seguramente puede haber un poco más de volatilidad, “Pero no hay apoyo económico”. “El cuento de que ‘vi muchas crisis’ no tiene fundamento, esta es la primera vez que la economía manda sobre la política”, afirmó y sugirió posibles medidas: “Cuando sea el momento adecuado, haremos los cambios necesarios”.
En medio del retraso en la llegada de un desembolso de US$ 800 millones, el ministro dijo que el FMI está en la “reevaluación” de las metas y que la reunión del directorio “será el día 13” (este jueves). . “A partir de ahí empezaremos a hablar de un nuevo programa, Lo tenemos desde agosto del año pasado, no va a ser algo nuevo y esperemos con ese nuevo programa, probablemente llegue el dinero“, explicó frente a un público de empresarios.
Durante su intervención en el evento organizado también por el instituto CATO, Caputo describió la “situación calamitosa” que encontró y advirtió que recibió “la peor herencia de la historia”: fue una combinación de “lo peor” del Rodrigazo, la hiperinflación. de Alfonsín y Menem y la crisis de 2001. “Teníamos un país con Cáncer fiscal y metástasis monetaria.financiero, cambiario e institucional, un paciente más cerca de pasar al otro lado de la vida”, afirmó.
Para el ministro, el Presidente se animó a hacer algo que “nadie lo hizo en 100 años” al lograr un superávit fiscal desde el primer mes, lo que implicó la reducción de un déficit de cinco puntos. Destacó la supuesta mejora en términos reales de la asistencia social y negó que se hubiera “sentado en el palco”, tras acordar un bono para pagar la deuda energética de Cammesa con el sector privado. “Este Gobierno no va a renunciar al orden macroeconómico”, desafió.
En otro tramo de su discurso, defendió la bajada de tipos del 133% al 40% nominal anual. “Subir la tasa se hace para descomprimir el crédito, en Argentina eso no se aplicó porque la inflación no se debió al sobrecalentamiento de la economía. Y, por otro lado, no hay crédito, pero tendríamos una montaña de pasivo remunerado, Si subiéramos el tipo, habríamos exacerbado el desastre monetario y hubiera sido imposible salir de la trampa“él explicó.
Caputo se encontraba en el Hilton con su equipo de funcionarios más cercanos. “Hay un equipo pequeño, 6 o 7, son economistas extraordinarios, que además de economía saben de finanzas y tienen vocación de servicio infinito”, dijo, y nombró uno a uno al presidente del Banco Central, Santiago Bausili, el secretario de finanzas, Pablo Quirnotus asesores Federico Furiase, Martín Vauthier, Felipe Núñez, y el vicepresidente del BCRA, Vladimir Werner.
El titular de Palacio de Hacienda minimizó, en cambio, la imposibilidad de aprobar leyes en los primeros seis meses de gestión. “Si sale la Ley de Base va a acelerar la economía, si no sale es cuestión de tiempo. “El presidente, el año que viene, ganará con el 60 o el 70% de los votos” Sostuvo, y advirtió, que “con la ley se van a marcar todos los dedos”. “La salida es dura pero segura, no nos dejemos atrapar por el hecho de que 30 no aprueban en el Senado”, añadió.
Ante un auditorio en el que estuvieron presentes Rodrigo Pérez Graciano (Grupo Stellantis), Juan Manuel Vaquer (Dupont) y Cristiano Rattazzi (exFiat), Caputo pidió a los empresarios apoyar el modelo. “Tienen que empoderarse, si están convencidos, la economía empezará a recuperarse rápidamente, el superávit que tenemos lo devolveremos en impuestos más bajos”, prometió, y les llamó a “confiar”. “No hay condiciones macro para que haya susto“el insistió.
