En Rosario “El Joker” va perdiendo

En Rosario “El Joker” va perdiendo
En Rosario “El Joker” va perdiendo

En el mismísimo riñón municipal la frase es esta: “El Joker” está perdiendo. El personaje así identificado es Lindor Alvarado, el verdadero representante de El Mal.

Hay caminos que se bifurcan con esta impresión municipal en un tema que tiene eso, varios caminos. El primero debe referirse al puesto. Si Alvarado, un narco detenido hace años, es “El Mal”, los de aquí son los buenos, “Los Buenos”. Hay más en ese cachito: Lindor Alvarado es muy inteligente, hacía pelear a “Los Monos”, lo domina todo desde la cárcel… le estamos ganando a una persona inteligente, por lo tanto estamos en el ranking de la Justa del Saber.

Identificarse con el bien, percibirse como el bien… no está mal. Identificar a uno, sólo a uno de los narcotraficantes y jefes de pandillas es reduccionismo y un colofón que nadie recita: Alvarado está preso, repito: está preso. Pregunta: ¿En qué país, en qué región, en qué provincia estamos, en qué estado estamos que un tipo de la cárcel es el Jefe de El Mal y recién ahora le estamos golpeando…? Hay más, sonreímos por ello.

El territorio de nuestras tremendas contradicciones es un jardín de caminos que se bifurcan y se bifurcan una y otra vez, se bifurcan y por allí caminamos.

Vamos de arriba a abajo. Milei, el presidente, Javier Milei, no sabe nada de este tema del narcotráfico y angelito de Dios, es un perfecto ególatra pero no toca este tema por dos razones. Ignorancia y desprecio. No es su problema. Escribo, ahora, una frase muy personal que “El Javo” nunca dirá. El peor de los pobres es el que se droga. La frase no es suya, pero… ¿Quién te dice que no respondas mañana a algo parecido?… De los pobres lo ha dicho todo…

La señora del “déjamelo a mí” quiere ser quien diga la cifra: sólo 60 muertes en un semestre. El título es tan obvio: “DISMINUYE EL NÚMERO DE MUERTES VIOLENTAS EN ROSARIO… las autoridades indicaron que en el primer semestre de 2024 la acción efectiva…”

Patricia Bullrich, familiar de Silvina, del martillero, de Banana Pueyrredón, de un pasado específico dentro de fuerzas duras de lejos, de partidos de allá, de partidos chiquitos de aquí y actual titular del “Déjamelo a mí” a este asunto de Violencia urbana y Estado. Qué título: Violencia Urbana y Estado. Al menos una súper rueda de prensa. Cómo evitar que quiera llevar esa medalla. Ella no lo toca, pero trabaja para ser abanderada.

El periodismo porteño, acostumbrado a la vida fácil y a la omnipotencia de la Casa Central, da por hecho que el relato Rosario es Droga y Violencia Urbana es correcto. Todos vienen un ratito, acompañan a quien aparece del Estado Nacional y luego, como las golondrinas de fin de verano, con el abandono de Gardel ya anunciado, son solo eso: golondrinas de un solo verano y querer detenerlas es un quimera… Vienen y se van. Algo cambia el eje de la información y quedamos en el olvido. No se han dado cuenta de que si Los K establecieron el cuento y los anuncios como mensaje del gobierno, que si lo hizo Macri, que si el inútil Alberto Fernández también lo intentó entonces ¿por qué esta mujer, una verdadera bomba de tiempo para los tantos secretos? que tiene en las entrañas del poder, lugar que frecuenta desde 1970, ¿no aprovechará el número?

Profundicemos: ¿por qué los pensadores del Mal no utilizarían la historia como parte de su tarea? El miedo llega y se propaga a través de la ignorancia y la narración de historias. El caso Di María es ejemplar. Mezcla, en ese perfume de oscuridad, una pandilla brava interna, una disputa territorial y lo que hace falta: una historia en los medios. Casa Central cuenta con fotografías, archivos de video, audios, material de archivo para diversos programas especiales. Quizás tenga que usarlos pero la esencia sigue ahí: los malos también saben contar historias. Nadie desconoce Media Power. Usemos la frase de un periodista que informa sobre Milei: ¿no lo ven? El mal también sabe contar historias, muchachos. Cada papel mal escrito no es un error, en un mensaje eficaz, una tremenda comunicación. Los malos también saben de qué se trata. Contar no es gobernar pero sí distraer. Vamos a hacerlo.

Con 16 años en la vida política, Maximiliano Pullaro, actual gobernador, es un partícipe necesario de este embrollo que se presenta positivo. La medalla debería ser suya y, seguramente, agregará como argumento la Ley de Narcotráfico. Es Pullaro quien va a anunciar que el número de muertes por violencia urbana en la Región del Rosario ha disminuido significativamente. Es su título y era su tarea como ministro, era uno de los ejes de su campaña y atención, atención: no olviden la acusación de Carolina Losada, entonces candidata y hoy senadora: Pullaro era parte del narcotráfico. Los archivos son tremendos cuando no se destruyen. Puedes perdonar, puedes reconciliarte, puedes estar de acuerdo, pero olvidar es difícil. No estoy en el corazón generoso de Pullaro pero vale la pena recordar que todos los archivos están disponibles. Pullaro inicia ahora mismo dos campañas. Reforma Constitucional y Corte Suprema de Justicia Provincial. Además de la Defensoría del Pueblo, además de las reformas y cambios de nombre en el MPA (Ministerio Público), la verdadera herramienta de poder, transversal a las otras tres, llega inmediatamente a los medios de comunicación (inmediatez mediática). Todo va en el mismo paquete. . Realidad, esperanza… y el archivo.

Ver tambiénDe Menem a Milei la canción es la misma

Rosario no está tan mal en esta tirada. Las muertes disminuyeron. El intendente Pablo Lautaro Javkin no participó de El Mal de la Peste, simplemente lo enfrentó: una contingencia negativa que no fue generada por él. Era un funcionario socialista y no puede negar que juró como alcalde sin revisar libros. Milei se presentó para su segunda alcaldía. Debe sonreírle a “El Javo” y decirle no soy Libertad Avanza, no soy yo, pero ella es cercana por objetivos y contemporaneidad; El periodismo rosarino, sonriendo con La Muni, tira titulares contra Milei y nunca pregunta lo que piensan y eso… ese es el tema de una sinuosidad que ejerce todo radicalismo. Javkin ya no es radical. Vive en el siguiente pasillo. Como también debe sonreírle a Pullaro, todo son sonrisas para el intendente, la contradicción va por debajo, con indulgencia mediática.

El tema de las drogas, del narcotráfico, Lindor Alvarado como el bromista puede servir de denuncia y tendrás razón; Javkin es más que Iluminación, Barrido y Limpieza, aunque no resuelve del todo el mandato de la ABL, pero tiene el legítimo derecho de subir al escenario en la lucha contra ambas cosas: la Violencia Urbana, el Narco Código y la Corrupción Estructural y, como segunda cuestión, la Defensa de Rosario y su vida normal, el gran objetivo en caso de derrotar a The Joker. Algo tendrá que decir/hacer el Turismo, algo está haciendo Cultura (el que más entrega), algo Transporte (el más comprometido) y algo está haciendo Hacienda (el Fondo está mal, muy mal).

Me quedo en deuda, interna, la peor, de conciencia, es deuda interna porque el Joker, antes de la penetración mexicana, era el Joker, era “el comodín” en el juego de “el Lobo” y la Canasta y El Rummy y ese “mono”, “comodín”, en español naipes existe pero tiene otro diseño y todo viene, si se quiere, de Los Arcanos Mayores en cualquiera de las versiones de El Tarot.

El periodismo porteño, acostumbrado a la vida fácil y a la omnipotencia de la Casa Central, da por hecho que el relato Rosario es Droga y Violencia Urbana es correcto. Todos vienen un ratito, acompañan a quien aparece del Estado Nacional y luego, como las golondrinas de fin de verano, con el abandono de Gardel ya anunciado, son solo eso: golondrinas de un solo verano y querer detenerlas es un quimera… Vienen y se van.

Por otro lado hay que hablar de la penetración de Batman y Robin y la exageración de referirse a Gotham City en nuestro acervo cultural, algo que es muy parecido a rendirse, aunque aún es visible, la generación donde me alineo fue penetrada. por el perro Plutón, el tío Bigotes y, obviamente, el Pato Donald y Mickey Mouse. Confieso que también me penetraron la pequeña Lulu y Tom y Jerry y, seguro, Misterix, Flash Gordon, Ernie Pike y el sargento Kirk. Es, en rebelión y aprovechando el método de penetración, que llega “El Eternauta”. Misma herramienta, diferente uso. Hay otra deuda. Discuta un tema esencial. El mejor bromista fue Jack Nicholson.

Cuando “El Javo” sonríe con maldad parece El Joker, aunque hay películas disfrazado de Robin. Milei no participa en esta lucha para derrotar a Lindor Alvarado, preso y con sentencias por firmar para que viva en prisión los próximos 100 años. Duda metódica: si la violencia aumenta, ya no será El Joker quien cargará con la culpa y las instrucciones. Ojalá no le atribuyan el regreso de “El Mal” al Chapulín Colorado. Ya nadie les creería.

 
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