Desde los municipios de Viedma, Carmen de Patagones y San Javier trabajan para desarrollar la primera herramienta de autoevaluación y planificación estratégica para operadores de residuos. Se trata de un proyecto desarrollado junto al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que permitirá capacitar a centros de gestión de residuos de toda América Latina.
La iniciativa es llevada a cabo por el Centro Ambiental Patagónico GIRSU, un consorcio público que agrupa a las tres localidades. Esta entidad, creada en 2019 como parte de un programa común de gestión integral de residuos, recibe alrededor de 2.500 toneladas de basura mensuales provenientes de la región Viedma – Patagones.
“A mediados de 2020, el BID nos integró a su Comité Consultivo de Operadores Públicos de Residuos de América Latina, que está integrado por centros de otros cinco países. Ahí empezamos a trabajar en esta herramienta que se llama GIRSU-Rating y es para operadores de residuos públicos”, dijo Diario RÍO NEGRO, Gastón Gutiérrezsecretario de Servicios, Espacio Público y Medio Ambiente de Viedma, y director del Centro Ambiental Patagónico GIRSU.
En palabras simples, esta herramienta permitirá al resto de plantas procesadoras de residuos de América Latina monitorear sus operaciones y autoevaluar la calidad de su trabajo. Además, pretende contribuir a la educación ambiental de las comunidades donde se ubican estos centros.
“Es un procedimiento de autoevaluación y planificación estratégica que permite a un operador de residuos hacer, de forma dinámica y ágil, una radiografía de todas las áreas que desarrolla. Esto puede ir desde la recolección domiciliaria, el traslado de residuos, la disposición final, el monitoreo ambiental e incluso la comunicación con la ciudadanía para mejorar la obtención de material potencialmente reciclable”, explicó Gutiérrez. El proyecto busca que los municipios mejoren sus operaciones a partir de la información recopilada en el proceso de monitoreo.
Según información proporcionada por el BID, Los fondos para el desarrollo de esta tecnología fueron aprobados en 2022 por el consejo directivo. Se desembolsó un total de casi 500.000 dólares.
El proyecto también involucra plantas de residuos de otros seis países, entre ellos Brasil, Ecuador, Colombia, México y El Salvador. La tecnología resultante aún se encuentra en fase de perfeccionamiento y aún no hay detalles oficiales sobre la fecha de su lanzamiento definitivo.
Una tecnología de monitoreo interno
Simultáneamente, el centro GIRSU inició con la aplicación de “tecnología inteligente de gestión de residuos”.
Básicamente, esta tecnología permitirá el seguimiento en tiempo real de los camiones recolectores. A través del análisis de sus rutas se podrán tomar decisiones sobre los puntos en los que es necesario reforzar la prestación del servicio y la recogida selectiva de material reciclable.
“Aplicaremos sensores a los vehículos de recolección para acceder al seguimiento de sus rastros”.. El acceso a esta información será público y los ciudadanos podrán consultarla en directo a través de una aplicación. Esto nos permitiría, por ejemplo, determinar dónde poner puntos verdes y en qué zonas son más necesarios”, dijo Gutiérrez. Se esperaba que la operación de esta innovación comenzara en junio o julio, aunque aún no ha habido anuncios oficiales.
La iniciativa fue financiada a través del BID, la Secretaría de Medio Ambiente de Corea del Sur, la Secretaría de Industria y Economía de Israel, la Fundación FEMSA de México y el gobierno de Suiza. La línea de crédito permitió un desembolso de hasta $30.000 para este proyecto.
La empresa colombiana UrbeTrack fue la beneficiaria del convenio y es la encargada de realizar la aplicación de la tecnología.
¿Cómo es el proceso de gestión de residuos en Viedma, Patagones y San Javier?
El Centro Ambiental Patagónico GIRSU funciona desde 2019. A diferencia de otros rellenos sanitarios del país, tiene características únicas. Se trata de la primera planta de gestión integral de residuos de todo el país operada por distritos de dos provincias. Además, es el único en Río Negro con capacidad para asegurar la trazabilidad de los residuos.
“En Argentina sólo existen 36 vertederos. Se han construido unas 300 plantas de clasificación de residuos, pero sólo 100 están operativas.. En cuanto a proyectos que tienen el ciclo completo, como el modelo de planta que tenemos en Viedma y Patagones, solo hay 20 operativos en todo el país”, confirmó Gutiérrez.
Su esquema de funcionamiento es sencillo. Una planta de transferencia recibe y clasifica el material recibido de las viviendas. Los restos que se pueden reciclar siguen un camino independiente. Mientras que la materia orgánica se deriva para su disposición final.
“¿Qué significa tener un vertedero? Que los residuos estén confinados herméticamente en celdas que cuentan con membranas geotextiles. No entra en contacto con el suelo, ni con el aire, ni con ningún recurso acuífero. Nuestro vertedero se encuentra ubicado a unos 25 kilómetros de Viedma. Esta distancia encarece la logística, pero permite una planificación a largo plazo, en caso de un crecimiento exponencial de la ciudad”, explicó Gutiérrez.
Aún no existe recogida diferencial en los domicilios de la Región. Por ello, para su clasificación es fundamental el trabajo de la Cooperativa de Reciclaje Contravi, encargada de organizar el material recuperado en 27 subproductos diferentes.
Este insumo reciclado es posteriormente enviado a centros de recuperación especializados ubicados en Alto Valle, Mendoza, Coronel Suárez y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
“Cada carga y cada viaje es la guinda de todo el trabajo de reciclaje que realizamos a lo largo del mes. Recuperamos y procesamos más de 20 variedades de material. La celulosa es uno de los materiales principales”, señalan representantes de Contravi a través de sus redes sociales. Diario RÍO NEGRO Se intentó comunicarse con el presidente de la cooperativa, José Paredespero no obtuvo respuesta.
El problema ambiental continúa
Desde la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Viedma-Patagones solicitan que la política ambiental sea más intensiva. Además, invitan a las autoridades a hacer “muchos más esfuerzos”.
“Hoy existe una cooperativa que se ocupa del reciclaje de basura. Pero, en el día a día, la realidad no es tan distinta a cuando el proyecto GIRSU no existía. Ya no hay quema de basura a cielo abierto, pero se observan focos de contaminación en sectores periféricos”, aseguró Diario RÍO NEGRO, Fabiana Vegareferente de la asamblea.
Desde el gobierno local destacan que es necesario intensificar las campañas de educación ambiental. Esto aumentaría la cantidad de material reciclado y fomentaría la erradicación de la microbasura.
