Por Amílcar Morales
Los manifestantes caminaron varios kilómetros por la capitalina avenida La Alameda, se detuvieron frente al Palacio de la Moneda, sede del Ejecutivo, y finalizaron con un acto político cultural en el llamado Bandejón de Los Héroes.
Hoy estamos aquí para sensibilizar a la población y crear conciencia entre quienes no conocen la tragedia que ocurre en la Franja de Gaza, dijo a Prensa Latina el profesor chileno Felipe Salas.
Es, añadió, un genocidio como nunca antes visto, porque es televisado y compartido a través de las redes sociales ante miles, tal vez millones de ojos en todo el mundo, dando una sensación de impunidad muy fuerte.
Mientras tanto, Mila Belén, una de las organizadoras de la marcha, aseguró a esta agencia que existe un compromiso muy fuerte con Palestina entre la sociedad civil, los movimientos sociales, los estudiantes y otros.
Cada vez se crea más conciencia ciudadana entre la población sobre esta situación de genocidio, afirmó.
En el acto celebrado al final de la caminata, Tania Melnik habló en nombre del grupo de judíos antisionistas contra la ocupación de Palestina y el apartheid.
Los judíos, dijo, sufrieron persecución muchas veces en la historia y por eso hace décadas prestaron juramento “Nunca más”, no sólo por ese pueblo, sino por toda la humanidad en cualquier parte del mundo.
“Sin embargo, hoy los hechos se repiten y no sólo en Palestina, porque no debemos olvidar a nuestros hermanos de otros países, ni el genocidio contra los pueblos indígenas, saqueados, asesinados y con sus culturas secuestradas”, añadió.
El activista recordó que el judaísmo no es sionismo, porque este último es un movimiento racista, una ideología fascista, colonial y genocida.
Melnik reconoció la voluntad del gobierno chileno de sumarse a la demanda de Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia, pero precisó que esto no es suficiente porque hay que cortar todos los vínculos con Tel Aviv.
En la actividad participaron representantes del movimiento estudiantil, realizando protestas y acampadas en solidaridad con el pueblo de Palestina y exigiendo el fin de las relaciones académicas con las universidades de Israel.
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