El Gobierno continúa negociando con los gobernadores “diálogos” para el traslado de diferentes proyectos de obras públicas inconclusas previamente financiadas con recursos federales. Esto permitiría a los gobernadores hacerse cargo de tareas pendientes. Por ahora, los acuerdos los sellaron Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Leandro Zdero (Chaco), Carlos Sadir (Jujuy), Ignacio Torres (Chubut) y Rolando Figueroa (Santa Cruz). Mientras tanto, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jado, y el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, negocian.
El miércoles, el ministro del Interior, Guillermo Francos, se reunió con Llaryora. En el encuentro se discutió qué proyectos podría terminar la provincia y cuáles la Nación podría atender con financiamiento externo. Por ejemplo, hay dos rutas que se están transformando en autopistas, la carretera 19 y la carretera Río Cuarto-Holmberg, y están paralizadas desde finales del año pasado.
Con Torres y Figueroa, el ministro firmó convenios para “el traslado de obras” a sus respectivas jurisdicciones, lo que significa que las provincias se comprometieron a asumir el financiamiento o ejecución de las obras detalladas en los convenios. Entre ellos se encuentran la construcción de hospitales y centros de desarrollo infantil, la finalización de obras de agua, saneamiento y mejoramiento urbano, y rutas y caminos, entre otros.
En el caso de Tucumán, el 90% de las obras públicas de la provincia son financiadas por la Nación. Su repentino cese en diciembre provocó el despido de 4.000 trabajadores de la construcción. Con el nuevo convenio, el Gobierno de Tucumán pretende reactivar varias obras, entre ellas el Acueducto de Vipos, el conjunto habitacional Procrear y el Programa Casa Propia (que prevé 3.150 casas y departamentos en total) y obras viales en las rutas 329 y 307.
Francos continúa la implementación del esquema legal para iniciar la transferencia de al menos 80 obras públicas en Chaco, Entre Ríos y Jujuy.
