Un hombre de 34 años admitió haber participado en dos intentos de robo a viviendas en la ciudad de Santa Fe y aceptó ser condenado.
El juez penal Jorge Patrizi admitió el acuerdo de juicio abreviado firmado por Matías Leonardo Alzugaray, y pasó el expediente a resolución. El escrito contó con el aval de la fiscal Rosana Peresín y la defensora pública Virginia Balanda.
Alzugaray reconoció la autoría de los delitos de “tentativa de robo calificado con hurto” y “tentativa de robo calificado por encontrarse en circunstancias de robo calificado con hurto”. Además, aceptó cumplir la pena de 1 año y 8 meses de prisión, cuya ejecución quedará suspendida por falta de condenas.
En esta línea, tras admitirse el juicio abreviado, el magistrado ordenó la libertad de Alzugaray, impidiéndole una serie de medidas comportamentales. Entre ellas, establecer un domicilio, prohibición de contacto con las víctimas y medida de distanciamiento de ellas y de sus domicilios, y la prohibición de consumir estupefacientes y abusar de bebidas alcohólicas.
Ambos hechos ocurrieron este año. El primero se remonta a la noche del 29 de marzo, cuando Alzugaray ingresó, junto a otro hombre, a un domicilio ubicado cerca de la calle Rivadavia al 6432.
Entraron por el patio, tras saltar un muro de dos metros, y abrieron el galpón de la casa. De allí sustrajeron un taladro Dewalt, un soplete, dos soldadores de estaño, seis rollos de cables de cobre, cuatro martillos, dos cortadores, tres destornilladores, un alicate, dos llaves de loro, una llave inglesa, una podadora, una botella de tres kilos y un carrito de recados rojo.
No pudieron llevarse las cosas, ya que al huir se toparon con la policía.
El segundo robo, por el que Alzugaray acabó tras las rejas y decidió celebrar el juicio abreviado, se produjo el pasado 1 de junio.
Eran alrededor de las 8 de la mañana cuando saltó un muro de al menos dos metros y medio y luego forzó la cerradura metálica de la puerta trasera de una casa en Mitre al 7500.
De allí sacó una computadora portátil marca Emachines de color negro, dos parlantes de computadora marca Genius de color negro, un cargador de computadora marca Hipro de color negro y un reflector de energía negro sin marca visible.
Sin embargo, Alzugaray no logró apoderarse de los objetos, ya que vecinos de la zona se percataron de lo que ocurría y personal policial acabó aprehendiéndolo.
