Le dispararon y lo dieron por muerto, pero logró sobrevivir. – .

La mañana de este sábado, antes de las cuatro, en las inmediaciones de Larrea y Mitre en el barrio Guadalupe Oeste desde la capital santafesina, se escucharon Numerosos disparos y gritos desgarradores provenientes de la vía pública.dos vecinos salieron de su casas y observó a un hombre tirado en la calle y ensangrentado.

Asistencia al herido

Ellos fueron quienes realizaron el reporte al centro de emergencias 911. Minutos después llegaron en una ambulancia oficiales y suboficiales de la Policía de Acción Táctica PAT y un médico del Servicio Integrado de Emergencias Sanitarias Sies 107, quienes confirmaron que la víctima presentaba varios impactos. bala en las piernas, y probablemente una de ellas en la arteria femoral, ya que estaba completamente ensangrentado. Luego lo llevaron de urgencia con sirenas y balizas al Hospital Cullen.

Policías del PAT permanecieron y preservaron el lugar donde se llevó a cabo el ataque criminal hasta la llegada de los peritos criminalistas de la PDI. También buscaron testigos del ataque e imágenes de las cámaras de seguridad públicas y privadas de la zona.

Internado en observación

Al llegar, la víctima fue recibida por los médicos de Medicina de Emergencia, quienes confirmaron la gravedad del estado del hombre identificado como Nicolás Hernández, de 31 años. Detuvieron la hemorragia, lo asistieron con transfusiones de sangre y asistencia respiratoria mecánica, le aplicaron vendajes y lo dejaron hospitalizado en observación.

Peritajes criminalísticos

Informaron la noticia sobre la ocurrencia del ataque criminal con la consecuencia de que Hernández fuera baleado y tirado en la calle así como el operativo policial y el traslado del paramédico a la sede de la Unidad Regional I La Capital de la Policía de Santa Fe, y hicieron lo propio con el fiscal de Homicidios de turno del Ministerio Público Carlos Lacuadra. Este último ordenó un informe médico sobre el estado de salud de la víctima, la identificación de testigos, la verificación de la existencia de una cámara de seguridad y la realización de los peritajes criminalísticos requeridos. Estos últimos fueron realizados por agentes del Área Científica de la Policía de Investigaciones de la PDI.