El senador Martín Doñate admitió que Ha pasado mucho tiempo desde que habló con el gobernador, Alberto Weretilneck, a quien acompañó fervientemente hacia su reelección hace poco más de un año. Sin embargo, esa distancia no separa al líder del PJ del concepto de “grandes acuerdos”. Incluso cree que la búsqueda de consensos debe ampliarse a sectores libertarios y PRO, para debatir profundamente el futuro de Río Negro. Y en esa línea, hoy sostuvo que La provincia debería debatir lo antes posible la necesidad de reformar su Constitución.
Doñate retomó su agenda de entrevistas y exposición en las redes hace varias semanas. La crisis en los hospitales rionegrinos le permitió dar las primeras señales de esa decisión, impulsando un plan de refundación del sistema de salud. También se produjo el primer despegue fuerte del camino compartido con Weretilneck, con su crítica a la sugerencia del presidente a los agentes públicos de aceptar empleos en el sector privado.
Esta semana el tema central es Ley Base. El senador peronista sostiene que No hay un solo artículo que valga la pena dentro del proyecto del gobierno nacional y anticipa que su voto será negativo de principio a fin.
En ese contexto, esta mañana dijo que esperaba una actitud similar de su colega Mónica Silva, de Juntos Somos Río Negro, aunque advirtió que la observó avanzar hacia una votación favorable en general, similar a la que realizó Agustín Domingo en Diputados.
Cuando habló de Silva en una entrevista radial, se mostró cálido. Dijo que sentía aprecio y respeto por ella, quien también es del Valle Medio.
En Weretilneck era más rígido. Además de resaltar que el diálogo está cortado “hace mucho tiempo”, posicionó a Río Negro como provincia “A punto de arrodillarse” ante la gestión de Javier Milei y fue punzante cuando dijo “comprender” la situación del Ejecutivo provincial, posicionándolo como un gobierno condicionado por el poder central por su débil situación económica y financiera.
Otro momento en el que se pulió la imagen de Weretilneck fue cuando comparó a los gobernadores patagónicos y destacó la estrategia del chubutense Ignacio Torres (Juntos por el Cambio), creyendo que supo trazar una estrategia en la que obtuvo mayores logros para su provincia que otros dirigentes del sur.
Sin embargo, Fue enfático en rechazar la idea de una etapa cerrada para el “Gran Acuerdo de Río Negro”.
A partir de una sutil diferencia, habló de la oportunidad actual de sellar “grandes acuerdos” en la provincia, no sólo dentro de los espacios políticos sino también con los actores económicos.
Y en esa línea dijo que la reforma de la Constitución es un tema que habrá que definir más temprano que tarde.
Los temas para una reforma constitucional en Río Negro
“La provincia merece un Poder Judicial mucho más ágil y dinámico. Hay organismos que ya no tienen sentido, como la Defensoría del Pueblo”, Avanzó al ser consultado qué temas considera prioritarios para esa eventual convención constitucional.
También consideró importante “definir en la Constitución una redistribución de recursos, porque si seguimos En este camino vamos a tener pueblos ‘sauditas’ por sus recursos bajo tierra y otros condenados a la pobreza”.. Los ejidos vecinos, repensar el sistema electoral de representación y un mayor nivel de accesibilidad al Poder Judicial también aparecieron en su lista de temas a incorporar en un eventual proceso de reforma.
“Nuestra Constitución es de 1988. Después de eso cayó el Muro de Berlín, pasó la reforma de la Constitución Nacional del 94, hay nuevos derechos… “Podría ser una gran oportunidad para celebrar un gran acuerdo”terminó.
