El próximo lunes 6 de mayo se cumplirán 209 años de la elección provisional del entonces coronel Martín Miguel de Güemes como gobernador de Salta.
Ese día de 1815, el Cabildo había sido convocado para discutir una comunicación del gobierno de Buenos Aires. Le informó que había asumido el mando del gobierno tras el derrocamiento del Director Supremo Carlos María de Alvear. Y además, en su reemplazo se había designado al general de brigada José Rondeau y al coronel Ignacio Álvarez para ocupar temporalmente ese cargo hasta que terminara su campaña en el Alto Perú.
Pero aquí en Salta había un maremoto desde hacía tiempo. Y así fue que cuando los lobbystas se reunieron ese día para discutir la actualidad en Buenos Aires, abajo, en las galerías y en la Plaza Mayor, los vecinos comenzaron a reunirse no tanto por la noticia lejana sino por el malestar que había estado sucediendo desde hace mucho tiempo. durante un tiempo reinó en la provincia.
Y así fue que poco a poco y conforme iba transcurriendo la reunión de los cabilderos, el pueblo empezó a pedir el nombramiento de un gobernador para cubrir la vacante dejada por Hilarión de la Quintana quien, sin decir agua se va, viene, había abandonado su designado hace unos meses para incorporarse a José Rondeau y al Ejército del Norte en Jujuy.
Siguiendo a don Bernardo Frías, ese pedido ya ventilado de los vecinos fue presentado al cabildo por el procurador municipal, doctor Pedro Antonio Arias Velázquez. Pero “el cabildo consideró extemporánea la presentación, e hizo regresar a Arias al pueblo e informarles de los documentos provenientes de Buenos Aires sobre el nombramiento de Rondeau para la jefatura suprema, para lo cual se pedía a cada pueblo de la Unión, ratificarlo, por libre voto”. , la elección hecha por la Capital”.
“En realidad”, continúa Frías, “el consejo quería que primero se hiciera la elección de ratificar o no a Rondeau, pero el pueblo respondió insistiendo en que se eligiera al gobernador”.
Luego de una breve deliberación, el concejo acordó “sin violencia alguna” según consta en el acta y así, dejando de lado las formalidades y teniendo en cuenta que el pueblo manifestó su deseo de que la elección se realizara en ese momento, los concejales inmediatamente llamaron a a los vecinos a un “ayuntamiento abierto”, la mayoría de los cuales ya estaban allí presentes.
el elegido
Respecto a la elección de Güemes como gobernador de Salta, el historiador Atilio Cornejo transcribe en su “Historia de Güemes” el acta que dice: “El 6 de mayo de 1815, los señores del Muy Ilustre Cabildo, justicia y regimiento de Salta, capital de de la provincia, Sr. Miguel Francisco Aráoz, Sr. Gaspar Castellanos, Sr. Alejo Arias, Sr. José Mariano San Millán y Figueroa, Dr. Sr. Juan de la Cruz Monge y Ortega, Dr. Juan Manuel Güemes, Sr. Inocencio Torino , D. Angel López, Dr. Pedro Antonio Velázquez y el Notario Secretario D. Félix Ignacio Molinas, se reunieron en la Sala Capitular, con el objeto de deliberar la solicitud del pueblo que se encontraba reunido en la Plaza Mayor sobre el nombramiento del Gobernador hasta entonces será designado el definitivo con la satisfacción y consentimiento de las Provincias Unidas”. En consecuencia – continúa el documento – “se realizó la votación respectiva, en el mismo acto, dando cada uno de los vecinos su voto en el orden posible, y recibidas y publicadas las respectivas papeletas, fue casi una votación general a favor del señor . Coronel D. Martín Güemes, quien a petición de las mismas personas fue puesto en posesión; después de recibir juramento del Alcalde de 1.ª votación, D. Miguel Francisco Aráoz y con la anuencia del Procurador General de la Sala Capitular que había asistido, en nombre de las personas que se encontraban reunidas en el exterior de la Sala Capitular”, y a quien el nuevo El Gobernador lo designó como su Teniente Consejero, “con el consentimiento y aclamación del pueblo”.
falsa acusación
“Al contrario de lo que algunos suponen”, afirma el doctor Atilio Cornejo, “no se trató de ninguna usurpación, sino de un acto de carácter democrático y legal. Parecería que el 25 de mayo de 1810 en Salta, bajo otros aspectos, el Pueblo y el Cabildo deliberan y deciden la elección de sus gobernantes. No es un motín militar… Sólo hablan las actas ‘del pueblo’. Nada significó tampoco –continúa Cornejo– que el nombramiento de los gobernadores provinciales emanara de la primera autoridad nacional residente. en Buenos Aires, por tanto: 1° la elección de Güemes se hizo con carácter provisional; 2° el gobernador provisional coronel Cornejo (su antecesor) no fue designado por la autoridad nacional, sino por Rondeau, Jefe del Ejército; “La autoridad nacional no existía desde que Álvarez, Director Supremo, había sido depuesto el 10 de abril de 1815, asumiendo el Ayuntamiento de Buenos Aires el gobierno interino y nombrando posteriormente a Rondeau y Álvarez Thomas”.
Esta certera explicación de don Atilio Cornejo sobre la elección de Güemes se debe seguramente a las objeciones planteadas en su momento por sus enemigos de Salta y Jujuy, y que luego le sirvieron a Rondeau para acusar a Güemes de Mondragón, cerca de Potosí, de “traidor y tirano de su pais”. Quien, “además de incitar -dice Frías- a las provincias a incorporarse al ejército, a ir todas contra él para aniquilarlo y aplicar castigos ejemplares”. Los 700 fusiles que Güemes había traído desde Jujuy para organizar la defensa eran sólo un pretexto porque lo que realmente molestaba era que Salta había decidido elegir provisionalmente a su propio gobernador, primer acto autonómico que se realizaba en las Provincias Unidas.
En todo caso, Rondeau, Jefe del Ejército del Norte y Director Supremo de las Provincias Unidas, fue quien incitó desde el Alto Perú a desatar una guerra civil cuando aquí, desde 1810, se padecía dolorosamente la Guerra de la Independencia. Bartolomé Mitre escribe al respecto: “No faltaron vecinos de Salta y Jujuy que estaban en malos términos con Güemes, quienes alentaron al General en Jefe (Rondeau) a acudir en ayuda del pueblo para sacudir la autoridad del líder”.
Y el conflicto Rondeau-Güemes escaló a tal punto que Buenos Aires envió un ejército de 2.000 hombres al mando del coronel Domingo French para “aprender a Güemes y subyugar la provincia de Salta”.
Por suerte, el 22 de marzo de 1816 el “Pacto de los Cerrillos” puso fin a este embrollo y el general de brigada José Rondeau tuvo que entregar el mando del Ejército del Norte al general Manuel Belgrano por orden del Congreso de Tucumán.
Tributo
El próximo lunes 6 de mayo el Instituto Güemesiano de Salta y la Academia de la Historia realizarán un acto académico para recordar la elección y asunción del General Güemes como Gobernador de Salta. Será en el Ayuntamiento Histórico (Planta Baja) a las 18:00 horas.
