víctimas y comunidades aisladas – .

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Según las autoridades de Riesgo, las intensas lluvias que azotaron la subregión del Baudó en Chocó han dejado más de 34 mil personas afectadas y han provocado graves daños en caminos terrestres, dejando sin comunicación a varias comunidades.

Las comunidades más afectadas

En el municipio de Medio Baudó, 1.922 familias, un total de 7.688 personas, se han visto afectadas en 17 comunidades por las inundaciones. Las comunidades de Pitalito, El Silencio, Villa Nueva y El Comercio en la cabecera municipal sufren inundaciones cada vez que hay fuertes lluvias, así como en la zona rural.

En Alto Baudó la situación es aún más crítica, con 6.092 familias, más de 27.000 personas afectadas en 41 corregimientos y 165 comunidades afro e indígenas. La distancia entre la cabecera municipal y las zonas rurales dificulta la entrega de ayuda humanitaria y actualización de información sobre la magnitud del desastre.

Además, el derrumbe del banco en la única vía de entrada y salida de la subregión ha dejado aisladas a todas las comunidades afectadas, dificultando aún más la llegada de ayuda humanitaria y la evaluación de los daños.

Autoridades locales han hecho un llamado urgente a los gobiernos departamental y nacional para brindar apoyo con maquinaria amarilla para retirar material de la vía y realizar su mantenimiento. También solicitan la reubicación de comunidades que se encuentran en zonas de alto riesgo, como la localidad de Almendró, en el municipio de Medio Baudó, que lleva más de 8 años esperando ser reubicada.

“Entre otras comunidades afectadas se encuentran el poblado de Platanares, el poblado de Puerto Córdoba y las comunidades indígenas de Puerto Limón, Naranjal y El Retoño. En total, el 60% de las comunidades del Medio Baudó están en zona de alto riesgo”, dijo Manuel Palacios, coordinador de Riesgos municipal.
Problemas de conectividad y energía.

Las inundaciones han provocado graves problemas de conectividad y energía en la región. Desde marzo de este año, la comunicación ha sido intermitente y el suministro eléctrico se corta con frecuencia durante todo el día.
“La distancia entre la cabecera municipal y las zonas rurales dificulta la entrega oportuna de información, agravada por la falta de conectividad a internet. En ocasiones, la ausencia del servicio durante 15 días dificulta la carga en línea de información urgente, lo que retrasa la entrega de ayuda humanitaria”, dijo José Holmer Palacios, Coordinador de Riesgos de Alto Baudó.

Las autoridades locales han calificado la situación de “crítica” y “caótica”. Los recursos del municipio son insuficientes para atender a todas las personas afectadas, por lo que manifestaron que requieren ayuda urgente de las entidades gubernamentales.

“Aunque hemos brindado cierta ayuda, es insuficiente para mitigar la gravedad de la situación que enfrentan las comunidades. Como Municipio hemos entregado más de 25 mil mercados, sin embargo, la situación en Alto Baudó sigue siendo compleja”, concluyó Palacios. .

 
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