Hablar de 2027 es lejano, pero no de 2025 y su carga política electoral para renovar escaños en ambas cámaras del Congreso Nacional.
Hay más ansiedad en las cuevas libertarias. Es lógico, imaginan a un Milei fortalecido para el próximo año, con avances en la economía. De ser así, creen que sumarían un plus en Río Negro frente al partido de gobierno y su líder Alberto Weretilneck, de cara a Nación.
Este sector no tiene una estructura definida. Confluye Lorena Villaverde, producto de la época, diputada nacional y paladar negro mileinista que llegó a la política sin pedigrí; Juan Martín, un hombre del macrismo y Aníbal Tortoriello, diputado nacional por Cambiemos, que fue presidente del PRO, que prefiere sentirse libre de acción, que adhiere a Javier Milei y que descansa en su propia riqueza electoral, nada despreciable.
Hay otros sectores satélites que podrían sumarse al oficialismo nacional, como Primero Río Negro, que si bien comparte ideología con el libertario, mantiene dependencia de la estrategia política nacional de Miguel Pichetto.
Falta. Sí, es correcto. Hay otras preocupaciones. Por supuesto, pero se empieza a cocinar en los fogones de la política. Al menos prepara los ingredientes principales que irán a la olla.
Entre los libertarios comenzó a surgir un patrón, y ante las posibilidades de repetir una victoria en la provincia, apresuran acuerdos y desestiman peleas.
Algunos comentarios apuntan a que Lorena Villaverde podría ser candidata a senadora en una fórmula con Juan Martín, segundo, pensando siempre en ganar. Ambos tienen una red de trabajo, porque tienen mandato como legisladores hasta 2027. De esta manera, Javier Milei tendría el primer candidato en Río Negro y Mauricio Macri, el segundo.
El primer lugar para candidato a diputado nacional sería para Aníbal Tortoriello, para repetir, pero él sólo piensa en mantenerse vigente en la arena política rionegrina. El traje nacional no le sienta bien, porque su objetivo era y será la gobernación de Río Negro, la cual no ve tan lejana porque podría cosechar beneficios con su marco libertario, más sus votos, que según algunas encuestas mantiene. . No pocos recuerdan que fue el primer “libertario” que habló de “casta” en su disputa con Weretilneck.
Este optimismo también se ve alimentado por la necesidad de que el LLA sume senadores y diputados al Congreso y obtenga argumentos de los gobernadores en la lucha parlamentaria.
En principio y con el riesgo de analizar un futuro lejano, habría una nueva grieta en la sociedad: por un lado, quienes apoyarán a Milei y por el otro, la fuerza opositora, que a nivel nacional aún no tiene un partido o líderes para dirigirlo.
En la provincia, esa responsabilidad recaería sobre el peronismo, siempre y cuando confluya en un proyecto de unidad, que también lo pondría en valor hacia 2027. La tarea está trazada y pudo organizar sus órganos partidistas. Los contactos entre dirigentes se multiplican y hay conciencia de la “oportunidad” política que ofrece esta situación.
Queda un viejo socio del desvencijado Juntos por el Cambio. La CC ARI que hoy -por lo que se pudo saber- aún no inicia este análisis electoral 2025, pero hay conversaciones y ve tan intrincado el panorama político nacional y la postura de la dirigente Lilita Carrió, que es posible que los locales pregunten por libertad de acción desde el marco nacional, para independizarse y poder aliarse en la provincia con el sector con el que tienen mayor identificación, y en esto hay afinidad con Tortoriello.
Se puede decir que la UCR está en la misma situación, aunque en este caso es más clara su conjunción con Juntos. Los radicales rionegrinos mantienen críticas a las medidas nacionales del libertario y apoyan a Martín Lousteau, presidente del partido, pero también observan a otros dirigentes y gobernadores nacionales. El radicalismo es cristal roto.
Pasando página, hay un interesante debate en el oficialismo, que se repite en procesos previos a las elecciones nacionales de medio término, donde el provincialismo no se valora y se diluye, al punto que obliga a buscar un referente nacional. , en una fiesta. donde confluyen diversos aspectos del arco político. Un dilema. Ir solo a una carrera nacional hoy es muy arriesgado. El principal candidato sería, pero no es un problema de nombres, sino de ganar o al menos quedar segundo. Nunca tergiversa que es una posibilidad y quizás las encuestas den claridad al proyecto del partido.
El problema es la dispersión al no ser una elección provincial. Quizás haya dudas sobre el aporte de votos a Milei desde su trama liberal-gorila, criticando también el acuerdo electoral entre Weretilneck-Doñate, de abril pasado, que ayer cumplió un año y no fue recordado. ¿Acto fallido o certificado de defunción?
¿Qué haréis juntos? No puede perder los dos escaños del Congreso. ¿Cuánto cuesta en Río Negro el intento del gobernador de liderar la oposición a Milei?
Con el espacio libertario armado y el Frente PanPeronista en el camino de la unidad, el riesgo de provincialismo es alto.
El gobierno provincial perdió la iniciativa política. Ocupados en atender las demandas sindicales de los trabajadores del Estado, contener los conflictos y ganar gobernabilidad, no hubo espacio para propuestas estratégicas y de futuro que convoquen a los rionegrinos, como sucedió en el pasado. Lejos queda aquel discurso del 10 de diciembre en la Legislatura provincial.
Gobernar sin dinero es complicado y este es el mayor juego de precisión de Javier Milei, quien demostró -incluso sin experiencia- que sabe qué botones apretar y así gestionar a los gobernadores y a la oposición.
Se puede argumentar en las estrecheces financieras y económicas, pero en política siempre hay espacio para algo más, (incluso para apropiarse de fondos del Tesoro Nacional), pero el escenario actual no ofrece previsibilidad y el Ejecutivo entra en un cono de sombra empujado por un gabinete gris, falto de ideas, que deja en paz al Gobernador. Como contrapartida, hay provincias con iniciativas. Sólo dos ejemplos: en Neuquén Rolando Figueroa avanza en una regionalización de la provincia; y en Córdoba crean institutos de biodiesel y ganadería para potenciar sus recursos. Sin ideas no hay proyectos y sin proyectos no hay futuro.
Las contradicciones surgen en la opacidad. La asignación de recursos tiene fugas. Un dirigente hospitalario -ante la falta de insumos en los hospitales- dijo a la prensa que en el gobierno “hay gastos innecesarios”. Todo trasciende. Es engañoso pensar que el gobierno puede hacer cosas que no se conocen. El secreto es siempre un recurso de poder, y contarlo es una tentación para demostrar que uno está cerca del poder.
Juntos, también viven en sus músculos -como partido- el reflejo de lo que sucede en el gobierno, y de la misma manera internalizan los problemas y esperan con ansiedad recuperar los recursos de la Nación, incluso con la sanción del regreso a la Ley de Ganancias. , donde las provincias participan en un 70%.
Sobre este tema también se acordó y se reveló que Weretilneck avanzó en las conversaciones con el ministro del Interior, Guillermo Francos, donde la provincia apoyará la Ley de Bases, pero se opondría a Ganancias.
Los hechos ocurridos el pasado domingo en Bariloche, en un asado de dirigentes locales de Juntos, narrados por este medio, son un síntoma de las vivencias internas del partido de gobierno.
Las causas de una derrota municipal, donde nunca se discutió el papel de cada sector, provocaron el estallido. Además, el hecho puntual denunciado sobre la connivencia del diputado nacional Agustín Domingo con el intendente Walter Cortés, irritó al núcleo de Juntos en Bariloche, pero mayor enojo surgió, al escuchar entre los argumentos de esta condescendencia, que “todo se sabe por Alberto y Facundo”.
Hay una dirigencia acostumbrada a hacer política desde la administración municipal y en ese aislamiento, donde además hay un gobierno provincial sin recursos y sin nada que prometer, se sienten huérfanos.
Una realidad que se repite donde no hay gobiernos municipales e incluso en estos casos se intenta ocultar las divergencias.
“Pato” Galmarini dijo en declaraciones recientes que “el peronismo tiene las pelotas hinchadas de la sociedad” y propone “salir ganando”. Más allá de la ocurrencia, un desafío para el peronismo rionegrino que también utilizó el inflador.
¿Problema de líderes? Quizás, pero la falta de ideas es aún mayor. Todo parece viejo, estancado en la historia –lleno de heroísmo y transformaciones– pero es sólo eso: historia. Incluso quienes en los años 70 luchaban por el relevo generacional (había que tirar a los viejos por la ventana) hoy pasan a la vejez en una disputa coloquial y en un intercambio de declaraciones, para disputar posiciones. Los eslóganes goebbelianos ya no tienen impacto.
La asunción de Milei al gobierno debería dejar un mensaje. Se votan los personajes con ideas disruptivas.
¿Cómo se resolverá en cada espacio esta transición hacia las elecciones nacionales de medio término? Como lo hizo el padre Brown, ese personaje de los libros de Chesterton, “por el conocimiento de la naturaleza humana más que por el razonamiento lógico”.
