El ajuste cede a Milei y sus consecuencias complican a Llaryora

El ajuste cede a Milei y sus consecuencias complican a Llaryora
El ajuste cede a Milei y sus consecuencias complican a Llaryora

La mayoría de los cordobeses apoyan el draconiano ajuste que aplica el Gobierno de Javier Milei y que comienza a afectar de manera especialmente severa a las empresas cordobesas, las cuentas de la administración pública y a cada uno de los habitantes de la provincia. Ni los politólogos ni los políticos encuentran explicaciones consistentes para este apoyo que se mantiene estable cuatro meses después del inicio de la administración y a pesar de la multiplicación de las preocupaciones económicas al interior de cada hogar.

En El Panal ya no buscan explicaciones. Se buscan salidas políticas y operativas a esta paradoja, que en el caso del gobierno de Martín Llaryora tiene características colosales, porque Córdoba es el lugar del país donde ese apoyo es más fuerte a pesar de que las consecuencias del ajuste nacional también son fuertes. . La recesión hace estragos en el sector privado, donde ya se observa la sangría del empleo formal vinculado a la construcción y la industria, y las cuentas de la Provincia comienzan a tambalearse mientras los gastos se multiplican.

La narrativa pro ajuste sigue funcionando políticamente para Milei y las consecuencias de este ajuste debilitan seriamente a las provincias. Los gobernadores son los mayores perdedores a nivel político. Y el gobernador de Córdoba lo es especialmente, porque la mayoría del electorado cordobés ni siquiera admite críticas al presidente libertario cuyo propósito es la destrucción del Estado y los dirigentes provinciales son sus adversarios favoritos.

Crítica prohibida

Llaryora optó por prescindir de toda crítica pública y preservar un esquema de gestión que lo diferencie del modelo nacional tanto como las cuentas lo permiten. Promueve su apoyo a lo que quedó de la “ley ómnibus” y comenzó a preparar el mega operativo de seguridad que exige la firma del “Pacto de Mayo” en Córdoba, pero al mismo tiempo obliga al extremo el presupuesto provincial para sostener políticas públicas activas. y medidas contracíclicas, para no trasladar los recortes impuestos por la Nación a los municipios y reunir argumentos que demuestren -cuando llegue el momento- que todavía hay Estado en Córdoba.

Hay un proyecto político en esa apuesta, pero es de alto riesgo. En marzo, los ingresos provinciales se desplomaron. La caída del 18% en términos reales sólo encuentra precedente en la pandemia de 2020. Numerosas variables se comparan con ese dramático momento social y no es sólo por los estragos que causa el dengue sin que la Nación siquiera registre el problema, sino porque la caída de las ventas es tan fuerte que en varias zonas se asemeja a la impuesta por el Covid. cuarentena. Los recursos compartidos por la Nación también están cayendo en picado y las transferencias no automáticas tienden a desaparecer.

Sólo por los recortes unilaterales en los envíos para el Fondo de Jubilación, para el Fondo de Incentivo Docente y para los subsidios al transporte, la Nación le está sacando a la Provincia casi 190 mil millones de pesos este año. La administración provincial asumió estos compromisos con recursos propios: el Tesoro local cubrirá los 150 mil millones que la Anses decidió no enviar en abierto incumplimiento de una ley para que los jubilados provinciales cobren sus sueldos. También pasó a cubrir el equivalente al incentivo docente y triplicó el gasto en subsidios a los usuarios del transporte público a través de boletos sociales.

Asimismo, buena parte de estos pasajeros corren el riesgo de quedarse sin autobuses debido a la crisis terminal del servicio interurbano y la mala dotación de los autobuses urbanos de la capital, agravada tras la caída de Ersa. En el transporte todo era precario y llegó Milei: el sistema está al borde del colapso en todo el país y Córdoba probablemente se anticipe.

Declive generalizado

No hay un solo sector de la economía cordobesa que no esté mal, ni siquiera el campo, aunque puede haber excepciones en nichos vinculados al exterior. La dirigencia rural no puede digerir del todo que no haya habido un solo gesto de la administración Milei hacia la agricultura y la inversión en silobolsas. El sector metalmecánico fue el primero en iniciar suspensiones por la caída de las ventas y actualmente hay casi ocho mil empleados suspendidos por trámites de crisis ante el Ministerio de Trabajo.

En el sector comercial, después de cuatro meses de caídas sucesivas en las ventas, ha llegado el momento de afrontar la tarifa de Epec y las facturas que Ersep valida para Aguas Cordobesas, y luego llegarán las de Ecogás: esas facturas también pueden terminar imponiéndose en ese zona un panorama pandémico. La crisis y el nivel de conflictividad en el que está entrando el sistema universitario nacional también preludia meses aciagos en la UNC.

Hay despidos y jubilaciones voluntarias en numerosas ramas de la actividad formal, y lo que sucede en el sector informal es imaginable. Lo que está pasando en Luque es un ejemplo perfecto del efecto del plan libertario en Córdoba: 200 de los 900 empleados de Mabe, la empresa mexicana que compró Alladio, fueron despedidos, porque desde enero se venden cada día 800 lavadoras Drean menos. . En esa localidad Milei logró uno de los porcentajes de votos más altos de la provincia donde logró el récord absoluto a nivel nacional.

La semana pasada la Provincia dio una primera señal contracíclica para sostener el empleo en el sector metalmecánico. A través de Bancor, ofreció 20 mil millones de pesos a los municipios para la compra de maquinarias y vehículos fabricados en Córdoba. No hay un aporte oficial, sino acuerdos comerciales con fabricantes y una garantía de cobro de descuentos de coparticipación para el banco, lo que obliga a la inventiva para apoyar a otros sectores, especialmente a los que siempre contaron con el Banco Nación y ya no lo hacen.

Otra paradoja de la Córdoba libertaria. En el respaldo a Milei es decisivo el discurso que apunta contra el supuesto exceso de empleados públicos, pese a que esta provincia es de las que menos agentes estatales tiene y eso quedó al descubierto a finales de marzo: fueron 15 mil empleados nacionales despedidos en En todo el país, pero en Córdoba fueron menos de 250, mientras que las bajas son miles en el sector privado. Las empresas nacionales que están en territorio provincial no serán privatizadas, pero cientos de empresas privadas se encaminan hacia el cierre.

 
For Latest Updates Follow us on Google News
 

PREV Ministro del Gobierno español acusa a Javier Milei de “ingerir sustancias” y el presidente de Argentina responde con duras críticas a Pedro Sánchez
NEXT Incertidumbre por riesgo en continuidad del PAE en Magdalena – .