El ejército israelí ha denunciado ocho lanzamientos de cohetes por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) contra el cruce de Kerem Shalom, en la frontera con Franja de Gaza, después de que el paso se reabriera a primera hora de la mañana, tras haber sido cerrado debido a un ataque perpetrado el domingo por la milicia palestina. Posteriormente, Israel volvió a cerrarlo.
“La organización sigue haciendo lanzamientos desde las zonas pobladas de la zona de Rafah hacia el cruce de Kerem Shalom para dañar a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y el funcionamiento del cruce“, indicó en un comunicado en la red social “X”.
Como consecuencia de los lanzamientos, un soldado resultó levemente herido, aunque recibió tratamiento en la zona y no tuvo que ser evacuado. “Hamás continúa poniendo en peligro a los ciudadanos de Gaza y llevando a cabo actos de terrorismo desde zonas civiles para intentar dañar a los israelíes y a las FDI”, destacó.
Los lanzamientos, que No han logrado cruzar la frontera.Las sirenas antiaéreas han sonado en el asentamiento de Shlomitcercano a Kerem Shalom, según indicaron las Fuerzas de Defensa de Israel en la citada red social.
El Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT), la autoridad militar israelí encargada de coordinar sus actividades en los Territorios Palestinos Ocupados, había indicado que el paso había sido abierto a primera hora del díapara la entrada de camiones con ayuda humanitaria a la Franja de Gaza”. Pero, tras los supuestos ataques de Hamás, el cruce de Karem Shalom ha sido cerrado nuevamente.
Uno de los portavoces de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA), Luisa Wateridgeha declarado que la parte palestina de Kerem Shalom es “una zona de guerra activa” que imposibilita las operaciones humanitarias.
La reapertura del cruce se produjo un día después de que el Ejército lanzara una incursión en la ciudad de Rafah, situada en el sur de la Franja y en la frontera con Egipto.que permitió a los militares tomar el control del lado palestino del paso fronterizo, suspendiendo las operaciones en la zona, incluida la entrada de ayuda humanitaria al enclave.
La operación en el cruce de Rafah se inició horas después de que el gabinete de guerra creado en Israel tras los atentados del 7 de octubre de Hamás acordara “por unanimidad” seguir adelante con la potencial ofensiva sobre Rafah después de que el grupo islamista palestino afirmara haber aceptado una propuesta de alto el fuego presentada por Qatar y Egipto, argumentando que el texto respaldado por Hamas “está lejos” de las demandas israelíes.
Un portavoz militar dijo EFE: “Hoy Hamás atacó Kerem Shalom, la tercera vez esta semana”, y también insistió en que Israel quiere ayuda para entrar en el enclave.
La población de Gaza se encuentra nuevamente”bajo un bloqueo total“dijo este miércoles el jefe de emergencias sanitarias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Mike Ryan.
Al comentar en una conferencia de prensa sobre lo que Israel llama un “ofensiva limitada” en la ciudad al sur de Gaza, donde hay más de 1,4 millones de palestinosincluidos 600.000 niños, Ryan dijo que esta incursión militar no puede describirse como limitada si No se permiten alimentos ni combustible.sin el cual ““Todo el sistema humanitario colapsa”.
“Hemos puesto algunos suministros en almacenes y hospitales, pero si no entra más ayuda a Gaza No podremos mantener servicios vitales en los hospitales.”, subrayó el jefe de la oficina de la OMS en los territorios palestinos ocupados, Rik Peeperkorn.
Paralelamente, este miércoles se reanudaron en El Cairo las negociaciones indirectas entre Israel y el grupo islamista Hamás con la presencia de delegaciones de Egipto, Qatar y Estados Unidos, mediadores en la guerra, informaron medios locales.
Se desconoce en qué etapa se encuentran las negociaciones de tregua, la última propuesta hecha por los mediadores ya ha sido aceptada por Hamás, aunque Israel continúa estudiándola.
La propuesta firmada por Egipto, Estados Unidos, Qatar y las Naciones Unidas Estipula una tregua de tres fases, de 42 días cada una, que conduciría al intercambio de rehenes israelíes retenidos por Hamás por prisioneros palestinos en cárceles israelíes, la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza y una “calma sostenida” en la franja.
Sin embargo, los bombardeos israelíes en Rafah y sus constantes amenazas de ampliar la operación militar amenazan con torpedear los esfuerzos de los mediadores.
(Con información de Europa Press y EFE)
