¿Cuánto duran las carnes congeladas? La carne de res, cerdo, pollo y pescado tienen tiempos diferentes

El frigorífico es uno de los principales electrodomésticos que podemos encontrar en una casa; Y a la hora de almacenar alimentos se convierte en un gran aliado, ya sea para congelar carnes o conservar los productos que compras a diario y necesitan refrigeración.

Según la Academia de Nutrición y Dietética de Estados Unidos, cuando los alimentos se mantienen a una temperatura adecuada, el crecimiento de bacterias se ralentiza, ayudando así a reducir el riesgo de intoxicación alimentaria. Pero existen límites en cuanto al tiempo que los alimentos pueden permanecer en el congelador.

¿Cuánto duran las carnes congeladas?

Las carnes crudas deben permanecer siempre en el frigorífico, ya que esto ayuda a su conservación. Pero debes tener cuidado con cuánto tiempo durarás allí, porque cada uno de ellos tiene un límite.

La Academia de Nutrición y Dietética de Estados Unidos explica que el tiempo que un alimento puede durar en el frigorífico dependerá principalmente de la temperatura a la que se encuentre. En el caso de la carne, se debe conservar a una temperatura de 0 °F (-18 °C) o menos.

Estos son los tiempos máximos que la academia recomienda para conservar estos alimentos:

Carne fresca de vacuno, ternera, cordero y cerdo: entre 4 a 12 meses.
Pollo o pavo entero: puede durar 1 año.
Pollo o pavo, en trozos: puede estar en el congelador un máximo de 9 meses.
Camarón: entre 6 a 18 meses.
Pescados azules como salmón, atún o bagre: entre 2 a 3 meses.
Carbonero, perca, trucha de mar o pez roca: entre 4 a 8 meses. El resto de pescados blancos: entre 6 a 8 meses.
Carne picada y embutidos: máximo 4 meses.
Calamar: 6 meses.
Chuletas de cerdo de 4 a 12 meses.

Las sobras también tienen tiempo para guardarse en el refrigerador. Para las carnes rojas o blancas cocidas, la academia aconseja que duren entre 2 a 6 meses y en cuanto a las croquetas o medallones de pollo, se recomienda que duren entre 1 a 3 meses.

El Departamento de Agricultura de Estados Unidos habla de las dos bacterias que pueden crecer en este tipo de alimentos, si no hay buenas prácticas y manejo.

Bacteria patogénica: Esto es peligroso porque provoca enfermedades transmitidas por los alimentos, explica Jenny Splitter, periodista y escritora científica. “Estas bacterias crecen rápidamente en alimentos no refrigerados y, por lo general, no pueden detectarse por el aspecto, el sabor o el olor de los alimentos”, dijo Splitter.
Bacterias de deterioro: Se desarrollan y crecen a medida que el alimento comienza a deteriorarse, en este caso si hay un cambio de sabor, olor y apariencia; sin embargo, es mucho menos probable que la persona se enferme.