El café, esa bebida cuya popularidad traspasa fronteras y culturas, no es disfrutada de la misma manera por todos. Según la plataforma Gitnux, se espera que el mercado mundial del café experimente un crecimiento anual del 4,65% entre 2022 y 2027. El ‘Coffee Outlook Report’ de la Organización Internacional del Café señala que Brasil es líder del mercado en América del Surrepresentando “83,3% del consumo de café de la región en los últimos años”.
Hay quienes no pueden disfrutar plenamente del café.
La intolerancia o sensibilidad a la cafeína puede desencadenar una variedad de síntomas que van desde indigestión hasta dolor de cabeza y fatiga. Estas molestias, a menudo subestimadas, difieren de las reacciones alérgicas, que incluyen picazón e hinchazón.
Es fundamental que tengas cuidado al beber esta bebida en ayunas.
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El estudio ‘Respuesta metabólica del cerebro humano a la cafeína y los efectos de la tolerancia’ establece que las personas intolerantes a esta sustancia experimentan importantes malestares psicológicos y fisiológicos en respuesta a la ingesta de cafeína.
“Se observaron aumentos significativos en el lactato cerebral, un líquido que proporciona soporte mecánico al cerebro y contribuye a la eliminación de productos metabólicos o de desecho, a nivel mundial y regionalmente específico en los sujetos”, afirma el artículo.
Además, como posibles signos de intolerancia/sensibilidad a la cafeína se expresan los siguientes:
- Dolor de cabeza
- Insomnio
- Nerviosismo
- Irritabilidad
- Micción frecuente o incapacidad para controlar la micción.
- Latidos rápidos
- temblores musculares
La cafeína, absorbida rápidamente por el cuerpo, puede alcanzar niveles máximos en el torrente sanguíneo dentro de los 15 minutos posteriores al consumo, según UCLA. La Clínica Mayo advierte que puede resultar contraproducente para quienes tienen problemas de presión arterial, recomendando no superar los 200 miligramos diarios en estos casos.
Sin embargo, la velocidad a la que se metaboliza la cafeína varía dependiendo de factores como la edad, el embarazo, ciertos medicamentos y ser fumador, lo que puede “conducir a una tasa de eliminación más lenta”.
Factores de riesgo y recomendaciones.
El café es una de las bebidas más consumidas a nivel mundial.
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La Clínica Mayo advierte sobre el riesgo de la cafeína en personas con problemas de presión arterial, ya que podría “bloquear una hormona que ayuda a mantener las arterias dilatadas” o “hacer que las glándulas suprarrenales liberen más adrenalina”.
La Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) considera que “400 miligramos de cafeína al día son generalmente seguros para la mayoría de las personas“, pero recomienda limitar la ingesta a “200 miligramos por día” en casos de variaciones en la presión arterial.
La doctora Liliana Papalia, especialista en Nutrición y Obesidad de la Universidad Favaloro, aconseja moderación en el consumo de café, señalando que “cualquier exceso siempre será de alguna manera irritante o generando algún síntoma en las personas”.
Además, un estudio publicado por Oxford Academic en 2011 revela que alrededor del “10 por ciento de la población” es portadora de un gen (CYP1A2) que influye en la sensibilidad a la cafeína, lo que marca una diferencia significativa en la forma en que las personas metabolizan y reaccionan a la cafeína. cafeína.
Aunque el café es una bebida que se disfruta mucho en todo el mundo, es esencial reconocer y respetar las diferencias individuales en la tolerancia a la cafeína. Comprender los posibles síntomas de intolerancia o sensibilidad a esta sustancia puede ayudarte a ajustar tu consumo para disfrutar del café sin efectos adversos.
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*Esta información fue reescrita con ayuda de inteligencia artificial a partir de información de La Nación de Argentina (GDA) y fue revisada por un periodista y un editor.
