El boda de Teresa Revuelta y Miguel Fierro Corsini Acabo de aclarar una duda de estilo: cómo usar tiara de novia y no ser artificial. La pareja se casó esta tarde en la basílica pontificia de San Miguel de Madrid, cuya escalera sirvió de aliada para que Revuelta luciera la espectacular y volátil cola de su vestido, que crecía desde su cuello; Éste, plisado y de gasa, replicaba en detalle el fajín bajo el pecho. Por lo demás, el diseño se movió en el ámbito de la discreción, dejando todo el protagonismo a la joya que adornaba su cabezay que estaba perfectamente integrado en el mirar, sin ser excesivamente grandilocuente. ¿Cómo lo ha conseguido? Analizamos las claves.
Mientras el concepto de tiara que solemos asociar con nuestra realeza favoritos Suele acompañarse de peinados formales, muchas veces moños muy clásicos, Teresa Revuelta ha tomado una decisión diferente. Algo tan fácil como una coleta, un peinado que, a priorino elegirías para el día de tu boda, pero en este caso es la elección perfecta. Gracias a este sencillo recogido, carente de ondas, trenzas o acabados excesivamente pulidos, la tiara destaca y al mismo tiempo desprende su seriedad y clasicismo. El equilibrio está sintonizado al máximo.