Hace apenas unas semanas, Omar Sánchez (33 años) anunció a través de Instagram el cierre definitivo de su negocio, su propia tienda de ropa y complementos de surf mara ‘Marcallao’, que puso en marcha en 2022 y que finalmente no ha tenido los resultados que esperaba. espera, ni puede, como afirma en el comunicado, dedicarle el tiempo que hace falta. Lo explicó de esta manera: “Tengo que informarles que Marcallao cierra sus puertas definitivamente, desafortunadamente. Es algo personal y laboral. Si no estás al 100% en un trabajo, en un proyecto, y no le dedicas todo lo que requiere, al final no sale como quieres”. Unas palabras sinceras y autocríticas, que muchos de sus seguidores le elogiaron, pero también fueron muy criticadas.
Muchas de las personas que comentaron el vídeo en el que el canario hacía este anuncio comenzaron a preguntarle de qué iba a vivir y a decirle literalmente que si estaba todo el día de vacaciones era normal que un proyecto como este no adelante. Omar no entró en polémica ni respondió a este tipo de comentarios. Y es cierto que si uno se detiene a analizar el contenido que Omar comparte en sus redes, Parece que su vida se basa en el disfrute y la diversión.en viajes, con su pareja y sobre todo en el mar, ya que el 90% de las imágenes del post son de él encima de una tabla de surf, que es su pasión.
Pero detrás de esa buena vida aparente, o no aparente, según se mire, es evidente que hay un trabajo remunerado, y ese es la publicidad. Tras muchas de sus publicaciones podemos ver la marca Renault, con la que colabora desde hace más de un año, las clínicas de estética Laooal con las que también mantiene una relación bastante duradera, la marca de ropa deportiva Xtep, la ginebra Beefeater o los colchones Emma. , y todo este contenido es pago y seguramente muy bien pagado considerando que Omar actualmente tiene 322.000 seguidores en su perfil de Instagram y casi 200.000 en Tiktok.
Y su exposición creció a medida que ocurrieron acontecimientos en su vida. Cuando conoció a Anabel Pantoja en 2017, él se dedicaba a dar clases de surf y no quería participar en la parte pública de la vida de su chica, de hecho, ella estaba muy preocupada por intentar mantener su relación fuera de sus apariciones televisivas. Pero llegó la pandemia, su primer intento de boda se vio frustrado, el contenido creado desde la casa que compartían… y Omar fue ganando posiciones. De hecho, su boda fue retransmitida en directo por Sálvame y su divorcio, cuatro meses después, casi también.
Y fue entonces cuando el ‘negro’, que así lo llamaba y como se le conocía, decidió seguir dando pasos hacia adelante. Ya había participado en ‘Supervivientes’, algo que a Anabel no le había gustado demasiado, pero tras su ruptura decidió formar parte ‘Pesadilla en el paraíso’ en 2022 donde conoció a Marina Romero, su actual pareja. Y ha sido con ella, con quien poco a poco ha ido teniendo una presencia más profesional en redes y convirtiendo las oportunidades laborales en la televisión en una forma de vida detrás de su cuenta de Instagram.
Y, en este momento, ese es su trabajo, crear contenidos para las marcas. Ya no está Marcallao, que empezó siendo un colegio y una tienda física, un proyecto que empezó con la sobrina de Isabel Pantoja, se reconvirtió en un punto de venta online y ahora ha cerrado sus puertas definitivamente para dar paso a “nuevos proyectos” que Omar Aún no lo ha compartido. Lo que es evidente es que las cosas no le van mal, vive de alquiler entre Canarias y Córdoba, ciudad donde vive Marina, y parece estar disfrutando mucho de la etapa actual, tanto que hablar de bodas y bebes, lo que demuestra que están viviendo una etapa feliz y que han encontrado el uno en el otro la complicidad que necesitaban para que lo suyo funcionara, y que cuando empezaron juntos en el reality muy pocos creían que sus sentimientos eran ciertos. Para mostrar un botón y el paso del tiempo.
