Casa de Humo / Iván Bravo Arquitectos – .

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Descripción enviada por el equipo del proyecto. Esta casa se encargó hace 10 años y hace sólo dos años se decidió iniciar el proyecto. A pesar de todo este tiempo, tanto los requisitos de los clientes como el sitio siguieron siendo exactamente los mismos. Los clientes son una pareja que nunca ha convivido, cada uno vive en su propio piso, a pocos metros de distancia en la misma calle de la capital. Por lo tanto, esta casa de vacaciones será la primera vez que tendrá sus camas bajo el mismo techo.

La casa está ubicada en el sur de Chile, en un claro natural sobre un largo terreno que termina en un lago. Flanqueado por una hilera de árboles a un lado y un pequeño arroyo al otro. La altura de los árboles y la exuberancia de los arbustos bajos desorientan a cualquiera que intenta buscar algún elemento del contexto lejano. Sólo la dirección en la que discurre el río nos permite localizar el lago, detrás de una densa capa de vegetación.

Casa Humo es un ejercicio de dicotomías domésticas. Partiendo de un cubo de 11m de lado con dos de sus caras divididas por la diagonal, todo el proyecto gira en torno a la articulación de pares opuestos. Las dos fachadas más grandes se abren a vistas lejanas del lago y de la parcela de la planta baja; los dos más pequeños son casi completamente ciegos, protegiendo la entrada a la casa en la esquina más baja.

Todas las áreas públicas comparten la mitad de la casa, que es un gran espacio abierto de toda la altura del volumen, mientras que los recintos privados se distribuyen en tres niveles de la otra mitad y solo son lo suficientemente anchos para acomodar a los propietarios y sus invitados. Dado que el proyecto celebra el compartir en las áreas comunes, una gran mesa, hecha del tronco de un árbol caído cerca del sitio, utiliza casi todo el espacio de la planta baja, funcionando como cocina y mesa de comedor. Por un lado, el suelo baja un escalón para proporcionar la altura necesaria para cocinar cómodamente, compartiendo siempre la misma superficie con quien come.

Las dos habitaciones principales están en el primer piso, una para ella y otra para él. Las puertas opuestas y el pasillo compartido permiten cierto grado de intimidad entre las habitaciones sin alterar su independencia. Dando espacio a ese delicado término medio que existe en la convivencia por separado. En el segundo piso, una sala de estudio se abre a la triple altura desde arriba. La geometría de la casa se hace presente con su techo a 45 grados, reduciendo al mínimo un lado de esta planta, desde el cual se puede tocar el techo, aunque con apenas unos escalones se eleva hasta los 5m de altura.

Tanto el interior como el exterior están revestidos de lamas de madera en bruto teñidas una a una. La rugosidad del material destaca sobre las diferentes tonalidades de grises dando un aspecto atemporal a la casa, que se mimetiza con las mañanas siempre cubiertas de niebla. Un camino sinuoso conecta dos pequeñas lagunas, pasa por la entrada de la casa y continúa junto al arroyo, entre los árboles, hasta una pequeña bahía donde se ve el lago por primera vez.