En el corazón de Calle Fallas, Desamparados, se encuentra un tesoro escondido para muchos; sino un ícono para la comunidad local: Guillermo Solís, conocido como Don Memo, ha forjado su legado como artista del pueblo, a pesar de carecer de reconocimiento formal y formación académica convencional.
A sus 65 años, este pensionista, sin hijos ni esposa, se ha convertido en el alma de la comunidad gracias a su talento innato para esculpir figuras de animales. Aunque nunca aprendió a leer ni a escribir, su arte habla por sí solo, capturando la esencia de la naturaleza con cada obra que crea.
Hace más de dos décadas, Don Memo inició su labor altruista decorando el parque comunitario. A través de los años, ha dado vida a más de 40 figuras de animales, convirtiendo el lugar en lo que hoy se conoce como “el Parque de los Animales”, homenaje a su incansable dedicación y creatividad.
Lo más admirable de su trabajo es que Solís trabaja sin ayuda, invirtiendo infinitas horas de esfuerzo y amor en cada detalle de sus creaciones. Con modestia, solicita el apoyo del Municipio de Desamparados y de los vecinos para brindar los materiales necesarios y así seguir embelleciendo tu querido parque.
Su historia es un conmovedor recordatorio de que el arte no conoce barreras ni limitaciones. Guillermo Solís, el artista de la Calle Fallas de Desamparados, nos enseña que la verdadera grandeza está en la pasión, creatividad y generosidad que dedicamos a lo que amamos.
