Antonio Fernández Alba (Salamanca, 1927), arquitecto y académico de la RAE, dejó su huella en la ciudad de Salamanca y sus obras son numerosas en el territorio salmantino. …
Del convento de rollo (1962), Premio de Arquitectura de 1963, el salmantino menciona que fue un trabajo “amable”. El edificio, por criterio expreso de la comunidad religiosa, debía responder a un carácter eminentemente tradicional en cuanto a métodos constructivos, con grandes muros de sillares de marés, característicos de las construcciones salmantinas.
Fernández Alba también se mostró satisfecho con la Residencia Universitaria Hernán Cortés (1974), en el Paseo de San Vicente, que fue remodelado interiormente en 2009, pero que mantiene sus robustos volúmenes exteriores, que respondían a una topografía complicada. Antonio Fernández Alba, que en 1989 ingresó en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, ha recibido también el Premio de las Artes de Castilla y León (1988), la Medalla de Oro de la Arquitectura (2002), la Medalla de Oro de la Ciudad de Salamanca (2002), Premio Nacional de Arquitectura a la trayectoria profesional (2003) y Medalla de Honor de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (2004).
Aunque se trasladó a Madrid con 20 años, el arquitecto mantuvo viva su relación con Salamanca aunque confiesa que hace años que no regresa a su ciudad natal.
