Washington (EFE).- El expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) fue interrogado este lunes por un funcionario de libertad condicional de Nueva York en una audiencia de rutina que tuvo lugar un mes antes de que se anunciara su sentencia por haber falsificado registros comerciales.
El futuro candidato presidencial republicano se conectó con la audiencia privada virtualmente desde su mansión Mar-a-Lago en Florida, informó CNN, citando fuentes cercanas a los hechos.
La sesión duró unos 30 minutos en los que Trump respondió a todas las preguntas formuladas y se comportó cortésmente, añadió la cadena.
La reunión forma parte del informe que el departamento de libertad condicional presentará al juez a cargo del caso, Juan Merchán, para ayudar a decidir la sentencia de Trump, que se anunciará en la Corte Penal de Manhattan el 11 de julio.
El caso de Trump
En mayo, un jurado de Nueva York encontró a Trump culpable de 34 delitos graves por falsificar facturas comerciales para ocultar el pago a Stormy Daniels, una actriz porno con la que tuvo una relación sexual, para proteger su candidatura presidencial en 2016.
Trump no está obligado a ayudar con la investigación previa a la sentencia, pero la falta de cooperación podría perjudicarlo.
En la audiencia previa a la sentencia, generalmente se le pregunta al acusado sobre su condena y otra información básica sobre sus antecedentes, como su empleo y sus antecedentes penales.
Trump no tiene antecedentes penales, algo que podría beneficiarle de cara a la sentencia.
Como parte del proceso, el equipo legal de Trump podrá enviar cartas de amigos y familiares a Merchán. Además, se espera que el equipo del expresidente presente su recomendación de sentencia el jueves, según medios locales.
La Fiscalía del Distrito de Manhattan también presentará un memorando indicando al juez qué sentencia considera apropiada para Trump.
Merchán podría sentenciar a Trump a libertad condicional o hasta cuatro años de prisión estatal por cada cargo, con un máximo de 20 años.
