Soluciones al caos. El Ayuntamiento ha tenido que habilitar una nueva salida de Plaza Nueva al exterior para combatir el caos en el que se ha convertido el tráfico en la zona tras el cierre de la calle Zaragoza por obras. Este desorden en la circulación se iba a agravar en los próximos días con los festejos taurinos en la Maestranza que iban a limitar aún más la circulación en las dos vías de fuga: las calles Adriano y Antonia Díaz. Una de las medidas adoptadas para dar una nueva salida a los vehículos por Bailén y Canalejas ha cosechado críticas por eliminar el uso peatonal de la plaza de la Magdalena. La medida ha obligado a los hoteles a eliminar parte de las mesas de noche, reduciendo también parcialmente el espacio para los peatones.
Tal y como informa este periódico desde el pasado domingo, el cierre de la calle Zaragoza por la renovación de las redes por parte de Emasesa está generando importantes problemas de circulación en la zona. El Ayuntamiento diseñó un plan de movilidad que dejaba solo una vía de acceso a Plaza Nueva: por San Pablo y Méndez Núñez; mientras que la salida hacia el Paseo de Colón era por las calles Doña Guiomar y Castelar o por Badajoz, Jimios y Harinas, para optar después por Adriano o Antonia Díaz. Estas calles estrechas, y la falta de información a los conductores, han generado enfrentamientos, con coches circulando en dos sentidos e importantes colas tanto para la salida como para la entrada.
El Ayuntamiento anunció el martes por la tarde nuevas medidas para, en la medida de lo posible, paliar estos problemas. Por un lado, se habilitó la circulación por la Plaza de la Magdalena en sentido a la calle Murillo, para permitir la salida de vehículos de los aparcamientos de la calle San Pablo y Rioja para permitir la salida del centro histórico por la calle Bailén y Canalejas. . Además, se cambiará provisionalmente el sentido de circulación de las calles Arfe y Dos de Mayo, para permitir la salida hacia el Paseo de Colón.
La mañana de este miércoles la vereda oriente de Plaza Nueva amaneció con un corredor de vallas para guiar los vehículos. Esta circunstancia tomó por sorpresa a muchos conductores, aunque un gran cartel en San Pablo indicaba la medida. Para los peatones fue una sorpresa encontrar un final prohibido en la plaza. Desde el carril improvisado para vehículos se sumó espacio para las mesas de noche, aunque se redujeron en número. “¿Por dónde van a pasar los peatones ahora? ¿Y los hoteles que han pagado la reforma se van a permitir quedarse sin un buen número de mesas de noche en plena Feria y temporada alta?”, advirtió un trabajador de la zona.
Este periódico pudo comprobar de primera mano el gran tiempo empleado en tomar un taxi desde la calle Méndez Núñez hasta el Paseo de Colón. El itinerario elegido por la mayoría de conductores para realizar esta maniobra es Badajoz-Jimios y Harinas. Sorprendentemente la otra alternativa (Zaragoza-Doña Guiomar-Castelar) apenas fue elegida por los pilotos. La circulación por estas calles es más rápida al no existir confluencia con otras calles. Aunque el destino es el mismo: Puerta del Arenal. Éste es el verdadero cuello de botella ya que los coches que salen de Harinas y Castelar coinciden con los que llegan desde Arfe y García de Vinuesa.
