El jueves en la escuela primaria N° 16 del distrito escolar N° 2 del barrio porteño conocido como Once, la explosión e incendio de un tablero eléctrico en la única puerta de la escuela provocó que se llenara de humo tóxico. El personal docente comenzó a realizar el desalojo en medio de la desesperación y angustia de los niños allí presentes y los desajustes de los docentes al punto que uno de ellos tuvo que ser hospitalizado. Cabe señalar que también en el jardín de infantes, que funciona contiguo a la escuela primaria, cuya puerta estaba cerrada con llave, debieron desalojar las instalaciones.
La evacuación tuvo que realizarse por la única entrada y salida “habilitada” donde se produjo el incendio, ya que la puerta no cuenta con las medidas de seguridad correspondientes ya que abre hacia el interior.
Los docentes de la escuela denuncian la ausencia de ayuda gubernamental y lo mismo en 12 de los 14 grados de las escuelas. Mientras se producía el desalojo, los funcionarios del gobierno y el director de la Misma, que llegó tarde, decidieron evacuar a los dos grados séptimos hacia la Plaza Miserere, donde estaban los medios de comunicación, mostrando solo un atisbo de lo sucedido y tergiversando los hechos ya que mientras la mayoría de la escuela estaba sin atención en el punto de evaluación establecido per se, desde el gobierno de la Ciudad intentaron maquillar una situación que no alcanza!
El personal del establecimiento convocó para este lunes un corte en la puerta del colegio para visibilizar, denunciar y denunciar la situación y el alcance de la crisis de la infraestructura escolar que, lejos de ser nueva, ha mostrado su cara más sangrienta.
La ministra de Educación, Soledad Acuña, habla de la “escuela del futuro” mientras las del presente se han convertido en potenciales cromañón tanto para los trabajadores de la educación como para los alumnos, y quienes acuden a la escuela pública exponen su salud e integridad física y psíquica.
---Mientras las denuncias por motivos de infraestructura escolar se multiplican en cientos de escuelas de la CABA, el presupuesto destinado a la reparación de escuelas brilla en la campaña presidencial de Larreta.
Urgen respuestas: el plan de obras debe realizarse de inmediato con el seguimiento de una comisión de docentes, directivos, sindicatos y familias.
Larreta-Acuña son los responsables directos de la política de vaciado y abandono de los edificios escolares.
Plan de obras ¡Ya!
