Se dice que ‘comemos con los ojos’, y en ocasiones esta frase es total y literalmente cierta. La apariencia de los alimentos es clave para generar apetito, y por eso fotografía de comida Es un sector en auge dentro del mundo artístico y la alta gastronomía. Una competencia internacional, Fotógrafo gastronómico del año de Pink Lady®se encarga de reconocer las mejores imágenes gastronómicas de todo el mundo, permitiéndonos dar un paseo por los cinco continentes a base de bodegones, retratos y paisajes.
Este concurso está dirigido a profesionales y aficionados de todo el mundo, y destaca la creciente Importancia de la fotografía gastronómica. Desde que se celebró su primera edición en 2011, este concurso Se ha convertido en uno de los más importantes del sector y cada edición destaca por la gran calidad de los trabajos presentados. Son imágenes de gran estética, pero van más allá e invitan al espectador a profundizar en una historiaconocer otras realidades y costumbres y también, en ocasiones, ofrecer una mirada crítica a la realidad.
El concurso tiene más de 30 categorías: personas, productos, fotos de boda, estilismo, fotos tomadas con el móvil, comida callejera, tartas… Además de bodegones o fotografías de platos, también hay premios que recogen el trabajo asociado a alimentos en países de los cinco continentes.
Bolas de pasta de frijoles rojos, por el fotógrafo chino Zhonghua Yang, ha ganado el premio general Pink Lady® Food Photographer of the Year 2024. La imagen, que ganó el primer lugar en la categoría Comida para celebración de Champagne Taittinger, fue tomada en la zona rural de Xiangshan, Zhejiang, durante los ajetreados preparativos de una fiesta para el Festival de Primavera, también conocido como Año Nuevo Lunar. La fotografía ha capturado la tradición de preparar dim sumcomo albóndigas de frijoles rojos, pasteles de arroz al vapor y pastel de arroz glutinoso, cada uno de los cuales tiene un legado de artesanía tradicional.
España ha logrado un gran éxito en el concurso de este año; Obtuvieron un total de cinco imágenes finalistas, incluido un ganador de categoría. El jurado de Pink Lady® Food Photographer of the Year ha distinguido a la fotógrafa española Virginia Morán como ganadora del premio categoría Comida en la mesa por Cerdo, Risa y Vino Tinto (‘Cerdo, risas y vino tinto’). El verdadero protagonista no aparece en el marco de esta fotografía premiada, Antón Arias ‘Baúl’una leyenda de la gastronomía leonesa que este mismo año cerró Los Arándanos, un templo de la gastronomía leonesa.
“El Chef Antón se despide de su querido restaurante, tras 30 años de servicio, invitando sus familiares y amigos más cercanos a un banquete sencillo pero sentido. El plato principal, procedente de una matanza de cerdo: hígado encebollado, servido con pan de masa madre y un buen Rioja. Una conmovedora despedida de una época culinaria llena de risas, alegría y buen vino tinto”, explica Morán sobre la fotografía.
“Mi narrativa fotográfica explora momentos rutinarios en los que aparentemente no sucede nada extraordinario. Para algunos, estos momentos pueden parecer insignificantes pero en realidad representan la esencia de la vida, la vida de todos”, explica la propia fotógrafa en su web.
No es la única candidatura española al concurso. En este caso, en el Categoría Mujeres fotógrafasotra representante de España se ha llevado el segundo premio con su instantánea ‘La última cena de las mujeres’, en la que representa esta clásica escena bíblica, sustituyendo a los protagonistas masculinos de Jesús y los apóstoles por mujeres, captadas por Jullianne Medeiros Domingos.
