Después de años de tensiones y titulares mediáticos que han sacudido a la familia real británica, Meghan Markle podría plantearse regresar a Inglaterra, siempre que se cumplan ciertas condiciones específicas.
Según revelaciones del experto real Tom Quinn a The Mirror, la duquesa de Sussex ha establecido una demanda clara para volver a pisar suelo británico junto a su marido, el príncipe Harry, y sus hijos Archie y Lilibet.
“Meghan dijo que sólo está preparada para regresar a Inglaterra si ella y Harry tienen un lugar propio y la seguridad que ambos consideran esencial”, dijo Quinn. Este requerimiento surge luego de un periodo de varios años en los que la pareja ha vivido distanciada de la monarquía y radicada en Montecito, Santa Bárbara, California.
Meghan y Harry regresaron juntos a Londres para el funeral de la reina Isabel II, pero cuando el rey Carlos III fue coronado, el príncipe regresó a casa sin su esposa.
Foto:EFE
Esta condición podría abrir una puerta a la reconciliación y al acercamiento con la familia real, especialmente con los hijos de William y Kate, que son primos de Archie y Lilibet.
“Si la pareja logra encontrar un hogar permanente y resolver el problema de seguridad, seguramente querrán traer a sus hijos al Reino Unido, pero hará falta mucha diplomacia para llegar al punto en que Archie y Lili puedan desarrollar una relación genuina y sincera. cálida relación con George, Charlotte y Louis”, añadió Quinn.
Privacidad y discreción: las reglas de oro en las celebraciones de Sussex
Además de las condiciones para un posible regreso a Inglaterra, los duques de Sussex han demostrado su preferencia por la privacidad en otros aspectos de su vida familiar. La reciente celebración del tercer cumpleaños de su hija Lilibet Diana es un claro ejemplo de cómo Meghan y Harry gestionan su espacio personal alejados del ojo público.
El evento, que tuvo lugar en su residencia de Montecito el pasado 4 de junio, fue un asunto estrictamente privado, marcado por reglas claras y estrictas para garantizar la confidencialidad.
Según información proporcionada por un vecino al medio alemán Bild, todo lo que sucede dentro de la propiedad de Sussex se maneja con un alto grado de secretismo. “Los vendedores tienen que firmar estrictos acuerdos de confidencialidad antes de una fiesta de cumpleaños como la de Lilibet”, dijo la fuente, subrayando la importancia que la pareja concede a la privacidad. Asimismo, destaca la selectividad en la lista de invitados, la cual estuvo conformada exclusivamente por amigos cercanos de la familia, sin la presencia de celebridades, enfatizando así su deseo de mantener un ambiente familiar y cercano para sus hijos.
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*Este contenido fue escrito con asistencia de inteligencia artificial, a partir de información de La Nación de Argentina (GDA), y fue revisado por un periodista y un editor.
